Vecinos del barrio Nuevo Ambato piden el cierrre definitivo de bares y discotecas

Varias personas optan por libar en las veredas de la avenida Machángara.
Situación. Varias personas optan por libar en las veredas de la avenida Machángara.

La avenida Machángara del barrio Nuevo Ambato, sur del cantón, se convirtió en una nueva zona rosa llena de bares y discotecas.

Los moradores del sector piden el cierre definitivo de estos centros de diversión, pues aseguran estar cansados de los libadores, robos, entre otros actos delictivos ocurridos en las últimas semanas.

 

Antecedentes

La madrugada del sábado 20 de mayo una persona de 30 años falleció entre las calles Julio César Cañar y Machángara.

El reporte policial indica que la víctima se encontraba en una discoteca del sector, al salir hubo una gresca por un intento de robo y fue ahí cuando recibió una puñalada en el cuello.

La misma madrugada se produjo el robo de un carro, al parecer los delincuentes habrían escopolaminado a los ocupantes que se encontraban libando en un bar de la zona, para luego abandonarlos en Cevallos y llevarse el vehículo.

 

EL DATO
La madrugada del sábado 20 de mayo se registró un asesinato entre las calles Julio César Cañar y Machángara.

 

Luego de todo lo sucedido en la avenida Machángara por la proliferación de negocios ligados al consumo de alcohol, las autoridades cantonales y provinciales intervinieron en el sector.

La tarde del 26 de mayo la Intendencia de Policía de Tungurahua junto con el Comseca, Servicios Públicos y la Policía Nacional ejecutaron un operativo.

En esta actividad se clausuraron dos locales por presencia de personas indocumentadas, además, alrededor de 30 jóvenes fueron multados por libar en la vía pública.

Junto con la Dirección de Tránsito del Municipio de Ambato también se retuvieron cuatro carros que estaban mal estacionados.

 

Más problemas

A pesar de la intervención de las autoridades el panorama en el sector no mejora, según el presidente del barrio, quien prefirió mantener su nombre en reserva por posibles represalias.

El representante aseguró que los bares y discotecas clausurados continúan funcionando de manera clandestina todos los días.

“Lo que queremos es que se cierren de una vez por todas estos negocios que están llenando al barrio de delincuentes, drogas y prostitución”, aseguró.

De igual manera, a través de un boletín de prensa, los vecinos del sector tomaron la decisión de aplicar justicia por mano propia.

“Se empezará a desalojar a los borrachos a punta de palo”, indica el documento.

 

Acciones

Paúl Moposita, intendente de Policía de Tungurahua, dijo que los operativos continuarán en esta zona para garantizar la tranquilidad de los vecinos.

De igual manera indicó que si se demuestra la reapertura de los locales clausurados, los propietarios podrían enfrentar acciones penales. (RMC)