Mujeres, las más afectadas con sobrepeso y obesidad en Ecuador

REFERENCIA. Las personas que padecen sobrepeso u obesidad ponen en riesgo su vida si no lo tratan a tiempo.

La carga laboral, responsabilidades con hijos, pareja, entre otros, han contribuido para que la salud de las mujeres esté en riesgo por el sobrepeso y la obesidad.

El Programa Mundial de Alimentos (PMA) con sede en Ecuador, determinó en octubre de 2019, que seis de cada 10 ecuatorianos padecen sobrepeso u obesidad, de estos datos, el 65,5% corresponde a las mujeres como las más afectadas con estas enfermedades.

Solo en Tungurahua, en este mismo informe de la PMA, el 55% de las personas en general padecen sobrepeso y obesidad, análisis que surge en medio de un país como este, en el que subsiste el hambre y la obesidad en el mismo territorio.

“En las mujeres el caso es más recurrente porque arrastran ese pasado machista en el que la mujer tiene un antes y un después del matrimonio o los hijos”, mencionó Antonio Muenala, sociólogo.

“Penosamente aún se conserva ese pensamiento del que antes de compromisos hay que cuidarse, pero una vez adquiridos ya no, y ese es el principio de una cadena de errores que nos llevan a tener estas preocupantes estadísticas”, mencionó

Para el especialista, la mujer asume tantas responsabilidades como le son posibles, “lo que le impide preocuparse por sí mismas y esto es parte de ese machismo aún existente en nuestra sociedad”, agregó Muenala.

 

Napo es la única provincia que registra el 49% de su población con 
problemas de sobrepeso y obesidad, el resto de provincias pasan del 
50% y 70%, según datos del Programa Mundial de Alimentos (PMA).

Vivencias

Maritza es una enfermera de 47 años que trabaja en una clínica privada de Ambato, su sobrepeso es de aproximadamente 25 kilos, pues para su talla de 1,51 metros no debería pesar más de 50 kilos, pero no es esa su realidad.

“Mi esposo me dejó hace dos años, creo que mi aspecto fue parte de esa separación, es que, entre la casa, los turnos de mi trabajo no me dan tiempo de preocuparme de mi peso, además, mi exmarido molestaba si yo quería ir al gimnasio porque decía que iba a perder tiempo”, aseguró.

En el mismo contexto, Rosaura, secretaria en una empresa privada al sur de Ambato, dijo que estaba al límite para tener obesidad. “Aunque quisiera poner de parte, la verdad es que es complicado. A mi esposo no le gusta que deje de comer o haga dietas, dice que es morirse de hambre, que es caro, que para qué, incluso ha llegado a celarme solo por decir que quiero bajar de peso, entonces sí es difícil”, contó la mujer.

 

Problemas médicos

El exceso de peso y la obesidad son condiciones que pueden terminar en patologías derivadas de estos padecimientos. Jonny Villacrés, médico gastroenterólogo y especialista en cirugía bariátrica, aseguró que las consecuencias pueden ser devastadoras si no se toman las acciones correctas y sobre todo a tiempo.

Villacrés aseguró que el sedentarismo es una de las causas que propician este grado de sobrepeso y obesidad de forma general.

“Las mujeres son más propensas a padecerlos porque su argumento es la falta de tiempo. También hay parejas que no les permiten seguir un plan de dieta o asistir a un centro de acondicionamiento físico, todo esto confluye para que la afectación se concentre en este género”, agregó.

 

Hay alternativas quirúrgicas que también podrían corregir estas 
enfermedades como la cirugía bariátrica, para pérdida de peso, 
sin embargo, los costos de estas intervenciones en Ecuador, son 
altos en lo que respecta al sector privado.

 

Fallas cardíacas, hígado graso, derrame cerebral, vesícula y hasta inmovilidad por obesidad mórbida, es parte de lo que el profesional detalla como resultado del exceso de peso.

“La persona puede adquirir volúmenes corporales importantes que pueden llegar a postrarlos. Lo que motivamos es el consumo moderado de alimentos, no hay una comida o producto que te engorde o te adelgace, son las porciones de alimentos las que deben considerarse a la hora de ingerirlas, de ahí todo podemos comer, quién dijo que no, el problema está en las cantidades y en la recurrencia de consumo”, enfatizó Villacrés. (MAG)