Alrededor de 3.000 personas forman parte de la guardia indígena, la misma que está presenta en las 150 comunidades de la provincia.
La crisis de seguridad que atraviesa el Ecuador no solo movilizó a la Policía Nacional y Fuerzas Armadas, sino también a la guardia comunitaria que se mantiene alerta en todas las zonas indígenas de Tungurahua.
En cada una de las comunidades de la provincia existen alrededor de 10 y 15 guardias, es decir, serían alrededor de 3 mil las personas que realizan varias actividades para evitar hechos delictivos en cada uno de sus territorios.
Trabajo
Antonio Chachipanta, dirigente indígena de Tungurahua, dijo que la guardia indígena ya estaba activada antes del estado de excepción y toque de queda que el presidente, Daniel Noboa, decretó el 8 de enero del año en curso.
“Hemos autoconvocado para estar alertas pase lo que pase en comunidades y parroquias rurales manteniendo nuestro espíritu solidario y con el objetivo de mejorar la seguridad”, aseguró.
Entre las actividades que realizan constan los patrullajes periódicos por el territorio con el objetivo de identificar vehículos o gente desconocida que pretenda robar las viviendas, cultivos o ganado.
De igual manera, en comunidades altas de Amabto, Tisaleo, Píllaro y Pelileo, existen controles vehiculares que los comuneros activan desde las 22:00 hasta las 05:00 con el objetivo de mantener un control de las carreteras.
La tecnología también es parte de su trabajo, pues mantienen contacto ininterrumpido vía grupos de WhatsApp.
Chachipanta mencionó que ya enviaron un documento a las autoridades para integrar el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Provincial y que están esperando una respuesta favorable.
EL DATO En Imbabura también mantienen activa a su guardia indígena.
Colaboración
Santiago Vargas, gobernador de Tungurahua, durante la rueda de prensa del miércoles 10 de enero, dijo que Policía Nacional, Fuerzas Armadas y el movimiento indígena de la provincia desarrollan un trabajo mancomunado por la seguridad de la provincia.
“Tenemos el apoyo del movimiento indígena que nos está colaborando en algunos espacios estratégicos como las antenas del Pilishurco”, dijo Vargas.
Seguros
María Telenchana, oriunda de Santa Rosa, parroquia de Ambato, dijo que se siente segura con el trabajo que realizan sus compañeros parte de la seguridad comunitaria en la zona.
Ella cuenta que en varias ocasiones la Policía tarda mucho en llegar a las zonas altas del cantón, por ende, es necesario contar con este grupo de personas que están pendientes de ellos, sus viviendas y ganado.
“No hemos tenido ningún robo en las últimas semanas, hemos pasado tranquilos en nuestras casas”, dijo la mujer. (RMC)