En medicina popular la ortiga es considerada un magnífico depurativo y diurético, además de astringente, hemostático, mineralizante y estimulante del sistema circulatorio.
Por vía oral, en infusión o el jugo recién exprimido, se le emplea en afecciones de las vías urinarias, sangrado interno o externo, tratamiento de la anemia, trastornos respiratorios y digestivos, reumatismo, gota, entre otras.
También se emplea en baños para dolores reumáticos, artritis, neuralgias, hemorroides, afecciones de la piel y del cuero cabelludo, en este último caso, mezclada con hojas de romero castilla y toronjil.
La ensalada de ortiga es considerada muy eficaz para combatir la anemia. Para el empleo de ortiga en afecciones renales existen incluso datos clínicos.
Asimismo, se emplea como drenador hepático y diurético de tipo volumétrico y eliminador de ácido úrico.
La ortiga es una hierba siempre verde que puede alcanzar de uno a 1,50 metros de altura densamente cubierta de pelos urticantes.
Además, tiene una raíz gruesa, tallo cuadrangular y acanalado con escasas ramificaciones. Hojas grandes de hasta 12 centímetros de largo, ovales o acorazonadas, de bordes aserrados. (RMC)