LA HABANA, (AFP) –
Surgido como un meteoro en el paisaje musical cubano, Polo Montaz, un simple ledor que nunca abandonlas sierras ni estudimica, esta un paso de convertirse en estrella.
Si bien en menos de un a se ha convertido en el cantante m popular de la isla y ha realizado varias giras internacionales, Polo Montaz asume la gloria con cautela y quiere permanecer siendo fiel a smismo.
Con el sombrero tradicional de paja en su cabeza, de rasgos marcados por los rudos trabajos del campo, las manos anchas y fuertes y la mirada bondadosa de los tidos, Montaz, cuyo verdadero nombre es Fernando Borrego Linares, no pretende m que ser «un guajiro (campesino) natural», como se titula su primer album.
Las canciones -de las cuales tiene un centenar en su mente, seg dice, con ritmo de bolero, de sones, de cumbia y de guaguanco- las ha escrito en los caminos de tierra que recorre desde su infancia.
Polo nunca abandoncomo lugar de residencia a su verde campi de la Sierra del Rosario en la provincia de Pinar del Rio, a unos 60 km al oeste de La Habana. De 46 as, no conocilas luces de la capital cubana hasta hace apenas tres as, cuando llega la gran ciudad por primera vez.
Desde su niz, al igual que sus seis hermanos y hermanas, integrla orquesta de su padre, que durante el d se dedicaba a fabricar carb de le pero en la noche bajaba a los poblados a tocar el acorde o el «tres», una especie de guitarra de origen campesino con tres cuerdas dobles.