Geovanny Andrés V., fue sentenciado la mañana de ayer a siete años de prisión por tentativa de homicidio y además deberá cancelar 50.000 dólares como reparación integral a la víctima.
El extranjero fue acusado como el autor directo de los hechos ocurridos el 18 de enero de 2016, en el interior de una casa de campo ubicada en el sector de Samanga de la parroquia Atahualpa.
Según la teoría del caso presentada por una representante de la Fiscalía de Tungurahua, Geovanny habría asistido con una amiga a un domicilio a cobrar 2.500 dólares de una deuda, la víctima al saber que este no era el valor sino de 1.500, se habría molestado solicitándole que se retire del lugar.
El victimario para intimidar a la deudora, al esposo y algunos amigos más que en ese momento se encontraban reunidos comenzó a disparar, una de esas balas llegó a la espalda de la deudora lo que le dejó inmóvil para siempre.
A los demás los dispararon en las piernas y el pecho, lo que ventajosamente no causó ninguna herida que comprometiera con sus vidas. Los ocupantes de la casa también habrían sacado una escopeta para defenderse, pero los cartuchos no se detonaron.
Varias pruebas fueron presentadas por la Fiscalía, además, se realizó la versión de la afectada quien atrás de un biombo recordó los hechos suscitados hace tres años. Y lo que pidió ante el Tribunal fue justicia y la mayor pena para el hombre que le quitó la movilidad de sus piernas para siempre. (EV)