De a poco, el gremio de taxismo se reactiva en Santo Domingo y ya hay más unidades prestando el servicio, pero las rentabilidades económicas han disminuido considerablemente.
Hace una semana, esta actividad sufrió ‘otro golpe’. El trabajo decayó a consecuencia de la lucha antidelictiva, la suspensión de clases presenciales y la declaratoria del toque de queda.
Algunos propietarios guardaron sus unidades para evitar cualquier ataque, como lo ocurrido en Esmeraldas y también los choferes decidieron no trabajar porque no ajustaban la tarifa de guardias.
Aún no se recuperan
A partir de esta semana, hay más taxis en la ciudad, pero el número de carreras continúan bajas. Debido a esta situación, algunos colaboradores se han visto obligados a renegociar con sus jefes.
Andy Moreira contó que entregaba 25 dólares por trabajar en el día, pero ahora no puede cumplir. Por lo tanto, ha acordado pagar 20 dólares hasta que las cosas se normalicen.
«Muchos padres de familia solicitaban taxis para llevar a sus hijos a la escuela y luego continuaban hacia el trabajo; eso ya nos generaba utilidades», expresó.
Carlos Nejer, también se dedica a esta actividad, contó que ha experimentado una disminución del 50% en el número de usuarios, situación que les genera pérdidas económicas a diario
“Las clases movían todo. En el centro, las cosas tampoco están normales y eso nos perjudica porque la gente evita salir ante la inseguridad existente”, expresó.
Perjuicio a motorizados
En algunos sectores de Santo Domingo, hay grupos de motorizados que transportan a estudiantes. En la urbanización Ciudad Verde, se practica esta actividad, pero ahora también están perjudicados por la suspensión de clases presenciales.
“Es entendible la decisión de las autoridades porque da miedo. Lamentablemente, también nos perjudica a quienes subsistimos de este trabajito”, dijo José V.(JD)
EL DATO Los taxistas nocturnos también reportan menos ganancias por el estado de excepción.