El reto es eliminar la ciudad de paso. Los turistas deben quedarse, enamorarse, descubrir la cultura Tsáchila, recorrer calles históricas, visitar sitios naturales y degustar la gastronomía.
Fortalecer el turismo en el cantón Santo Domingo significa trabajo mancomunado entre el sector público, la empresa privada y la ciudadanía. La misión es consolidar una ciudad que invite a quedarse y transformar sus atractivos en productos que generen una experiencia turística integral.
Existen fortalezas indiscutibles para el turismo en Santo Domingo: la cultura Tsáchila, la naturaleza y el potencial gastronómico.
Para Lizardo Suárez, promotor turístico, la mayoría de ciudades resaltan su historia en museos y libros, “en cambio nosotros aprendemos y conocemos prácticas milenarias de la mano de nuestros ancestros. Los Tsáchila se constituyen en una fuente inagotable de saberes y tradiciones”.
La riqueza culinaria se refleja en la producción de carne, otro gancho turístico, que sitúo a Santo Domingo como la mejor parrilla de Ecuador, mención otorgada por el Ministerio de Turismo, en 2018.
Las cascadas y ríos son recursos naturales que permiten experimentar recorridos, avistamiento de aves y deportes de aventura.
Las limitaciones
A pesar de existir bases sólidas para apuntalar el desarrollo turístico, año tras año se precariza el repunte anunciado por la falta de políticas públicas, las inexistentes líneas de crédito, la suspensión de planes y proyectos por cambio de autoridades, el desconocimiento de las principales necesidades y la nula creación de productos turísticos, señaló Suárez.
Aclaró que el sector privado invierte grandes cantidades de dinero en la construcción, remodelación y arriendo de locales dedicados a la actividad turística.
“El trabajo en conjunto es fundamental”, especificó Ivanova Aguilera, directora municipal de Turismo. “Trabajamos en capacitar al sector y promocionar los atractivos”.
Para difundir las bondades del cantón, el Municipio de Santo Domingo habilitará un punto de información turística en la terminal terrestre y el funcionamiento del portal web que albergará atractivos, paquetes, circuitos y productos. Además, desarrolló la campaña ‘Conoce Santo Domingo’.
La pandemia
El turismo es uno de los sectores económicos más afectados a causa del COVID-19. En Santo Domingo el 50% de los servicios turísticos corrieron riesgo de desaparecer, algunos cerraron.
A pesar del desplome de varios negocios, Suárez indicó que se abrieron diversas oportunidades a través de cocinas virtuales y la entrega puerta a puerta de productos. Después de la pandemia se renovaron zonas gastronómicas dentro de la ciudad como la tan sonada “calle del colesterol” (avenida Venezuela), calle Río Lelia, la avenida Anturios, el Mirador del Bombolí y el sector de La Lorena.
Mencionó que es pertinente un ordenamiento municipal y renovación urbanística, declararlas zonas turísticas para que las autoridades intervengan y rediseñen estos espacios acompañados de un adecuado ornamento, servicios básicos y seguridad; además, que brinden beneficios a los emprendedores con créditos a bajo interés, análisis tributario, capacitación y asesoría.
Los miedos
Para promover la reactivación en el turismo fue clave el exitoso plan de vacunación ejecutado por el Gobierno Central, lamentablemente opacado por un mal mayor: la inseguridad.
La última masacre en la cárcel Bellavista y la ola delictiva en la ciudad limitan la recreación y el ocio, espacios propicios para impulsar el turismo.
A pesar de la percepción de inseguridad, Dorian Hidalgo, director ejecutivo de la Cámara Provincial de Turismo, señaló que, el 60% de la gente acude a los balnearios el fin de semana. En feriado alcanzan el 100%.
La tendencia sucede porque Santo Domingo se encuentra entre las 10 ciudades con mayor desarrollo económico y mayor poder adquisitivo, eso permite la reactivación. “El problema es que el turismo lo hacemos entre nosotros por eso los alojamientos están completamente vacíos. El reto es atraer a los visitantes y construir una ciudad de estadía”. (CM)
Oportunidad
Antes de la pandemia, Santo Domingo apostó por el Turismo de Reuniones, Incentivos, Conferencias y Exposiciones (MICE, por sus siglas en inglés), debido a su ubicación estratégica para conectar los Andes y la Costa ecuatoriana.
Realidad
Actualmente, los emprendimientos son liderados por jóvenes. Las nuevas generaciones miran en el turismo, la gastronomía, el marketing digital o el diseño gráfico diversas maneras de crear negocios, mejorar sus ingresos e impulsar un cambio significativo.
El dato
Las nuevas propuestas culinarias son encabezadas por jóvenes empresarios.
El dato
Desde 2018, Santo Domingo fue declarada la parrilla del Ecuador. Ahora se posiciona como ‘La Capital de la Carne’.