No se registraron personas heridas, pero sí algunos daños materiales no muy cuantiosos.
Los caudales de los ríos Baba y Chila subieron de manera repentina, ocasionado inundaciones en áreas privadas.
Renato Zambrano, presidente de la parroquia San Jacinto, informó que la situación se replica en todas las épocas invernales y que afortunadamente en esta ocasión no dejó personas heridas.
Otro punto
El puente ubicado en el recinto San Andrés también fue afectado. Se prevé intervenir este sector el jueves 17 de marzo.
Han solicitado el apoyo del Gobierno Provincial de Santo Domingo de los Tsáchilas y confían realizar una intervención completa para evitar futuras inundaciones.
Hay temor en varios habitantes de la localidad, quienes piden apoyo de las autoridades para combatir la fuerza del invierno. “El impacto de la naturaleza es fuerte. La lluvia provocó el desbordamiento de los ríos y la temporada invernal continúa”, manifestó Jacinto Vargas. (JD)