¿Subir la tasa de interés para reactivar la concesión de créditos hipotecarios?

IMPORTANCIA. Al comprar una casa, se debe tomar en cuenta todo el costo financiero que representa.

La Junta de Política y Regulación Financiera aprobó que la tasa máxima de los créditos para vivienda aumente del 10,4% al 11,5%. Se busca dar más flexibilidad para que las instituciones financieras, en medio de costos de financiamiento crecientes y escasa liquidez interna, puedan prestar a más personas.

En 2023, se cerró con una caída del -6,6% en la concesión de créditos hipotecarios. Entre enero y febrero de 2024, el decrecimiento se profundizó al 18,4% anual; según datos del Banco Central del Ecuador y el Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess).

Una de las razones de fondo es que se había vuelto cada vez menos rentable colocar crédito de vivienda al 10,4%, cuando el costo de levantar financiamiento externo ha llegado hasta el 18% y el costo de levantar financiamiento interno también había aumentado de manera considerable con vía con tasas de interés de hasta más del 10% como pago por los depósitos a plazo de los ahorristas.

Ante este escenario, la Junta de Política y Regulación Financiera aprobó la resolución No. JPRF-F-2024-0104 donde se establece una subida de la tasa de interés máxima de los créditos hipotecarios del 10,4% al 11,5%.

Este medida ya está en vigencia desde el 15 de marzo de 2024 y el 11,5% se mantendrá hasta el 30 de junio de 2024.

A partir de julio, la tasa de interés máxima podrá tener variaciones mensuales como consecuencia de un cambio en la fórmula de cálculo.

Se tomará en cuenta la tasa activa efectiva referencial del mes inmediato anterior, que corresponde a la tasa promedio de interés que cobraron las entidades financieras en ese mes.

Joan Proaño, vocero de Constructores Positivos, reconoció que ante las restricciones de liquidez, y el creciente costo de financiamiento, las entidades financieras se ha vuelto más estrictas a la hora de conceder créditos de vivienda, y están privilegiando a los clientes triple A.

La decisión de la Junta busca que se amplíe la concesión de esos créditos más allá de los clientes tripe A; pero tiene una consecuencia adversa.

Se estima que, por cada medio punto que suba la tasa de interés, se pierde alrededor de 4,5% de capacidad de endeudamiento.

Es decir, si antes se podría aplicar a un crédito de $100.000, ahora se lo podrá hacer a uno de $91.000.

El sector inmobiliario tuve un mal 2023 con una caída de más del 20% en las reservas de vivienda. Habrá que esperar cuáles son las consecuencias de la decisión de la Junta de Política y Regulación Financiera.

Además del crédito hipotecario regular, también existen opciones más baratas, con créditos por debajo del 6%, a través del Biess o del financiamiento con tasa de interés subsidiada en bancos y cooperativas.

Si se quiere revisar la resolución de la Junta, se puede acceder a este enlace. (JS)