La reducción de riesgo y daño es clave para mejorar la calidad de vida de las personas. La tecnología influye en este caso.
La tecnología es parte de la evolución del mundo y en aspectos de salud no es la excepción. Por ejemplo, influye positivamente en la reducción de riesgo y daño (proceso que busca modificar o disminuir las condiciones de riesgo existentes).
Es el caso de las campañas del uso de protector solar, que permiten generar consciencia para prevenir el cáncer de piel; sin embargo, esto no significa que la persona quede exenta de riesgos. Asimismo, evitar consumir alimentos altos en azúcar no implica que una persona esté libre de tener diabetes.
Reducción de daños en el tabaquismo
A medida que avanza la innovación, se desarrollan mejores productos para diferentes usos en distintos ámbitos de nuestras vidas, por ejemplo, los vehículos eléctricos, que reducen las emisiones de gases de escape.
Lo mismo ocurre con el cigarrillo. Las empresas invierten en investigación científica, impulsando la innovación en busca de mejores alternativas para los adultos que deciden continuar consumiendo tabaco o nicotina.
En la actualidad, existe una gran variedad de estos productos, como los cigarrillos electrónicos, las bolsitas de nicotina y los productos que calientan tabaco.
Estas alternativas sin humo no están exentas de riesgos y entregan nicotina, que es adictiva, pero representan una opción para los adultos que quieren seguir fumando. La base de esto está en que estos son productos libres de humo y por lo tanto presentan una menor exposición a sustancias nocivas o potencialmente nocivas presentes en el humo del cigarrillo.
*Entre Itabsa y La Hora existen acuerdos comerciales para esta publicación.