Restaurantes son el comodín para las restricciones del COE nacional

CRISIS. El sector facturó casi $500 millones menos en 2021 en comparación a 2019
CRISIS. El sector facturó casi $500 millones menos en 2021 en comparación a 2019

En casi dos años, los puestos de trabajo se han reducido 40% . Cada vez que hay restricciones son los primeros en la lista, mientras otras actividades no se ven afectadas

Cada vez que hay un repunte de contagios de COVID-19, ciertos sectores y actividades son los primeros en la lista del COE Nacional para imponer restricciones, o incluso paralización completa.

Los restaurantes son parte de esos afectados, a pesar de que cada día tienen que cumplir 40 acciones para estar dentro de los protocolos exigidos y minimizar la propagación del virus

En los últimos días, se han vuelto a modificar los aforos y las medidas de control, pero el peso no es igual para todos.

Los restaurantes reclaman 

Diego Vivero, representante de la Agremiación de Restaurantes de Pichincha (Agrepi), aseguró que las medidas se toman para restringir a determinados negocios, mientras otros “gracias a Dios pueden seguir operando”.

“Queremos creer que se están tomando las decisiones técnicamente, pero a pesar de que en muchísimas ocasiones hemos pedido los soportes técnicos que las justifiquen, no hemos recibido nada”, dijo.

Actualmente, los restaurantes tienen 40% menos puestos de trabajo de los que registraban en 2019. El año pasado, se produjo una cierta recuperación, incluso se llegó a vender más que en 2020, a pesar de que solo una parte de los locales puede ofrecer servicios a domicilio, entre otros limitantes. Sin embargo, el inicio de 2022 ha sido peor que el inicio 2021.

Unos pesan más que otros

Darío Lozano, propietario de un pequeño restaurante en el norte de Quito, comentó que no solo se toman decisiones sin sustento sino que también la información oficial es confusa.

“Por qué si tiene sentido cerrar escuelas, restringir restaurantes y otros negocios pequeños, mientras en la industria, el transporte e incluso en el fútbol no se toman medidas, o cuando las toman no las hacen cumplir”, acotó

Acciones desiguales

La capital está en color rojo, lo que implica que el aforo para los restaurantes se reduce al 30%. “Los restaurantes nos hemos convertido en una especie de placebo de esta pandemia. Para que la gente piense que se está controlando de alguna manera. No se ha probado que seamos los sitios donde más se propaga el virus”, acotó Vivero.

En este sentido, los miembros del sector consideran que “porque no tiran piedras y cierran calles”, o tienen algún tipo de poder de presión, son relegados a trabajar en desigualdad de condiciones con respecto a otros.

Esa desigualdad también se da con respecto a los informales, “y con una serie de negocios que se han generado a raíz de las medidas restrictivas. Hay gente que está haciendo mucha plata gracias a estas medidas”, añadió Vivero.

Las compensaciones llegaron a medias

Durante 2021, se establecieron descuentos de hasta 50% en cobros de prediales, permisos, patentes, entre otros. Pero desde el inicio de 2022 se han restablecido las tasas completas, a pesar de que la situación se ha complicado.

Además, Andrea Miño, propietaria de un restaurante y cafetería, explicó que, aunque no han tenido utilidades en los casi dos últimos años, si se les ha cobrado retenciones en la fuente, que son una especie de anticipo del impuesto a la renta.

“Eso se debería devolver inmediatamente, lo que nos permitiría cubrir una serie de deudas con proveedores”, aseveró.

Asimismo, los empresarios del sector piden que se deje de utilizar cualquier tipo de pretextos para cobrarles tasas turísticas.

Finalmente, una de las principales promesas incumplidas desde el Gobierno es el acceso a financiamiento barato. Ese financiamiento serviría para poder seguir resistiendo, sin reducir aún más las operaciones y el nivel de empleo

El principal problema es que las instituciones financieras, tanto públicas como privadas, les exigen balances con buenos números; pero no valoran el historial de décadas de trabajo, que demuestra que, una vez que la pandemia vaya pasando, serán capaces de recuperar sus anteriores niveles y cubrir préstamos.

En el mejor de los casos, el sector de los restaurantes prevé que una recuperación total tomará entre dos y tres años

Antes de la pandemia, los restaurantes facturaban más de $1.600 millones en todo el país. En 2021, no se superó los $1.120 millones