Especialista en gestión de riesgos advierte sobre la vulnerabilidad de Quito ante emergencias

Problema. Luego de un percance de tránsito en la Simón Bolívar, esta vía estuvo colapsada durante siete horas.
Problema. Luego de un percance de tránsito en la Simón Bolívar, esta vía estuvo colapsada durante siete horas.

En la ciudad falta organización para enfrentar emergencias viales. Esto se pudo constatar con el siniestro de tránsito ocurrido en la avenida Simón Bolívar y que afectó el tráfico vehicular por siete horas.

La falta de preparación y coordinación en la ciudad de Quito en caso de emergencias, especialmente viales fue analizada por el especialista en gestión de riesgos, Christian Rivera, quien en entrevista con LA HORA expuso la necesidad de  optimizar los recursos disponibles y desarrollar estrategias efectivas para garantizar la seguridad de la ciudad y sus habitantes.

Rivera, quien ha trabajado en diversas instancias de respuesta a desastres, resaltó que si bien Quito cuenta con recursos tecnológicos y humanos de primera categoría, la falta de coordinación entre las agencias de respuesta y la ineficiencia en la toma de decisiones pueden llevar a situaciones caóticas como la ocurrida el 6 de octubre de 2023, cuando se registró un siniestro de tránsito en la avenida Simón Bolívar.

En la vía periférica, a la altura de la avenida De Los Conquistadores, se registró el volcamiento de una hormigonera que se llevó por delante a otros tres vehículos, provocando la muerte de tres personas y generando siete horas de tráfico en la ciudad.

Impactos colaterales

Rivera enfatiza que emergencias como la de la Av. Simón Bolívar, por donde circulan unos 90.000 automotores diariamente, también generan problemas colaterales que deben ser considerados en la gestión de riesgos. El impacto económico a negocios que no pudieron entregar productos a tiempo y la afectación a las personas que tuvieron que enfrentar horas de tráfico son dos muestras de esto. También se suman los inconvenientes para personas con discapacidades o afecciones de salud.

El especialista argumenta que la decisión pública de retirar el ‘Pico y Placa’ solo empeoró la congestión en la ciudad, lo que muestra la falta de alineación entre las estrategias tácticas y la disponibilidad de recursos.

En este contexto, Rivera sostiene que Quito no está adecuadamente preparada para hacer frente a emergencias mayores, como un terremoto, una erupción volcánica o un deslave, que podrían tener consecuencias devastadoras si no se toman medidas efectivas.

Recomendaciones

Una de las principales recomendaciones de Rivera es la implementación de una estrategia de comunicación efectiva que eduque a la población sobre cómo actuar en situaciones de emergencia y que promueva la idea de quedarse en casa a menos que sea absolutamente necesario salir.

Además, sugiere la creación de comandos de incidentes que se centren en salvaguardar la vida y la salud de las personas en lugar de simplemente abordar la emergencia en sí.

Rivera concluye que ‘no hay fórmulas mágicas para la gestión de riesgos’, pero aclara que es esencial aplicar métodos como el Sistema de Comando de Incidentes o Puestos de Mando Unificados para garantizar una respuesta efectiva.

Agrega que Quito debe aprender de experiencias pasadas y prepararse de manera más activa y estratégica, teniendo en cuenta que ninguna emergencia es igual a otra.

Acciones de la AMT

En el accidente de tránsito que se registró el viernes, la Agencia Nacional de Tránsito (AMT) asegura que dos minutos después de recibir la alerta, desplegaron un contingente de 60 agentes civiles de tránsito, 10 patrulleros, 20 motocicletas, 60 conos, dos rollos de cinta, tres grúas livianas, una grúa pesada y una grúa extrapesada.

Según la agencia, se tomaron medidas estratégicas para controlar la situación, cerrando el acceso a Guápulo hasta la Ruta VIVA en dirección norte-sur, así como otras vías clave de la ciudad, como la Av. Simón Bolívar y Av. Oswaldo Guayasamín, Av. Simón Bolívar y Zámbiza en sentido norte-sur, Av. Simón Bolívar y el redondel del Ciclista, Av. Simón Bolívar y la Casa de la Selección, y Av. De Los Conquistadores en dirección occidente-oriente.

Para evitar la generación de más congestión vehicular, la agencia tomó la decisión de implementar contraflujos en diversas vías clave, como la Autopista General Rumiñahui, Av. Velasco Ibarra (Norte-Sur), Av. Mariscal Sucre (Norte-Sur) y Av. Oswaldo Guayasamín en sentido Quito-Valle.

Adicionalmente, la AMT suspendió temporalmente la restricción del pico y placa y asignó personal de tránsito en vías longitudinales clave, incluyendo Av. Eloy Alfaro, Av. 12 de Octubre, Av. 6 de Diciembre, Av. 10 de Agosto, Av. Mariscal Sucre, Calle Guayaquil, Av. Pichincha, Av. Maldonado, Av. Velasco Ibarra y Av. Napo. (EC)

Alcalde ausente en el lugar del accidente

En ocasiones anteriores, el Alcalde de Quito, Pabel Muñoz, ha estado presente y ha ofrecido declaraciones en situaciones de emergencia, como incendios forestales o incidentes en el Teleférico de Quito, donde quedaron atrapadas personas.

Sin embargo, en este trágico accidente, el Alcalde no se presentó en la escena. No fue hasta las 20:06 que emitió un mensaje en su cuenta de Twitter, expresando solidaridad con las familias y seres queridos de las personas que perdieron la vida en el siniestro de la Av. Simón Bolívar.

En el mismo mensaje, mencionó que el tráfico en la ciudad colapsó, ‘como era de esperarse’, pero señaló que los flujos de tráfico estaban comenzando a normalizarse.

El alcalde también pidió la aplicación de la ley y la investigación policial, particularmente del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT), para determinar las responsabilidades en el fatal incidente.

Las emergencias viales pueden también generar problemas colaterales como pérdidas económicas y generar estrés en la población.