Cuatro claves que explican el riesgo de apagones en Ecuador

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HECHO. El consumo de electricidad se ha disparado en Ecuador, mientras la inversión privada está frenada y el Estado no tiene dinero.

En 2023, el consumo de electricidad se ha incrementado en más del 10%, cuando el promedio histórico era de 4%. Las inversiones para aumentar la capacitad de generación se han estancado en los últimos 6 años. Tenemos una ley eléctrica que traba la inversión privada y un Estado sin dinero suficiente.

El sector eléctrico ecuatoriano está pasando por una situación crítica. El pasado 3 de octubre de 2023, el ministerio de Energía anunció apagones de hora y media durante tres días, pero casi de inmediato negó ese primer anuncio y dijo que las cosas están bajo control.

Por el momento, se ha logrado mantener el volumen de importación de electricidad desde Colombia y se hacen esfuerzo para reparar y ampliar la capacidad de las centrales termoeléctricas (con base en combustibles fósiles), pero el riesgo de apagones persiste con un estiaje (época seca en la cuenca del amazonas donde están casi todas las centrales hidroeléctricas) que podría durar al menos hasta marzo de 2024.

1.- Calor extremo y consumo al alza: Durante 2023, el consumo de electricidad en el Ecuador se ha incrementado, en promedio, entre 10% y 12%. Esto es mucho más que el promedio histórico del 4%

Gonzalo Uquillas, gerente de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec), durante una entrevista con radio Centro de Guayaquil, aseguró que el incremento llegó a un pico del 17% en el pasado mes de junio.

«Esto se debe a un crecimiento generalizado de la temperatura. Los equipos de aire acondicionado trabajan a toda capacidad y durante todo el día», dijo.

Según el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), el pasado mes de septiembre fue uno de los cinco más calurosos desde los años 70 del siglo pasado.

Esto tiene dos efectos importantes. Por un lado, aumenta el uso de aparatos con alto consumo de electricidad. Por el otro lado, ha reducido de manera drástica los caudales de las centrales hidroeléctricas, de las que depende casi el 90% de la generación eléctrica del país.

Uquillas puntualizó que los caudales de la central Paute han caído a sus niveles históricos más bajos en 40 años. Y, en el caso de otras centrales como Coca Codo Sinclar, se requiere 220 metro cúbicos por segundo para funcionar a toda capacidad, pero lo que se tiene ahora es un máximo 127 metros cúbicos por segundo.

2.- Inversiones retazadas y ley obsoleta: Uquillas, durante la entrevista en Radio Centro, reconoció que en proyectos de inversión privada como Villionaco, El Aromo, entre otros (energías alternativas como eólica y solar), ha tomado casi dos años y medio firmar los contratos luego de la adjudicación.

De acuerdo con el gerente de Celec, el actual marco legal no es amigable a la inversión privada y tiene múltiples candados.

«Los inversionistas piden una sola cosa: garantía de pago. Para poder hacer eso, y debido a que tenemos tarifas subsidiadas, se necesita instrumentar figuras como fideicomisos. Sin embargo en este país, y todos conocemos el estado de la justicia, se interponen acciones de protección de algún alcalde y eso bastante para echar abajo todo el proceso», aclaró.

En este contexto, Uquillas aseguró que una de las tareas del próximo presidente debería ser el impulso de nueva nueva ley eléctrica.

Con un Estado sin dinero para inversiones, en los últimos seis años apenas si se ha aumentado la capacidad de generación de electricidad con dos proyectos pequeños.

Sin embargo, Ecuador tiene potencial para generar hasta 32.000 megavatios adicionales, pero sin inversión privada no existe futuro para el sector eléctrico.

Uquillas ha dicho que Celec cuenta con un plan para afrontar el estiaje con una inversión total de $309 millones para reparación de centrales, compra de repuestos y equipos, y ampliación de capacidad instalada (sobre todo termoeléctrica)

Desde el Gobierno se asegura que se ha logrado ingresar 300 megavatios adicionales con acciones para repotenciar centrales termoeléctricas como Gonzalo Cevallos, Enrique García, Quevedo y Termogas Machala.

3.- Sin capacidad para almacenar agua en épocas de abundancia: La fragilidad del sistema eléctrico ecuatoriano está dada en que, si bien se tiene suficiente capacidad instalada en centrales hidroeléctricas (casi 90% de la generación de electricidad en el país), lo que no tenemos es capacidad de almacenamiento de agua.

«Se da la paradoja que entre abril y septiembre no podemos almacenar toda el agua disponible. Nuestros reservorios son muy pequeños porque son aprovechamientos de ríos de montaña», explicó Uquillas.

Así, cuando tenemos caudales altos de los ríos, no se cuenta con infraestructura para acopiar o reservas agua para la época de sequía o escasez.

4.- Consumo irresponsable de la electricidad: En los últimos años, el consumo per cápita de electricidad se ha más que duplicado en el Ecuador. Esto ha puesto más presión a un sector eléctrico que ya no tiene la billetera estatal (vía boom petrolero o créditos caros de China) para construir mega proyectos.

Por eso, el mismo Uquillas dijo que se debe impulsar un programa de consumo responsable de electricidad. Este tipo de programas han generado una reducción en la demanda de alrededor del 7% en países como Colombia.

Consejos para un consumo responsable de electricidad:

  • Utiliza focos de bajo consumo: ahorran hasta un 75% de energía.
  • Apaga la luz de los ambientes que no estés utilizando.
  • Usa la luz natural el tiempo que más puedas.
  • Gradúa el termostato a 20 ºC como máximo en calefacción y equipos de aire acondicionado. Recuerda que cada grado suplementario representa un 7% más de consumo energético.
  • Emplea la lavadora con carga completa: ahorrarás agua y electricidad.
  • Descongela el frigorífico: la escarcha crea un aislamiento que puede acarrear un 20% extra de consumo eléctrico.
  • Apaga la computadora si no la estás utilizando: un aparato en posición de espera puede representar hasta un 70% de su consumo diario.
  • Desconecta todos los aparatos eléctricos que no estés utilizando.
  • De ser posible, usa energías alternativas para la producción de electricidad, como celdas fotovoltaicas para utilizar la energía solar o generadores eólicos.
  • No uses planchas y cafeteras en exceso.
  • Sustituye las estufas eléctricas por estufas de gas.
  • Limpia periódicamente los focos y lámparas, el polvo bloquea la luz.
  • Pinta los techos y paredes de tus cuartos con colores claros, para tener mejor iluminación.
  • Sustituye los aparatos viejos por nuevos, ya que consumen menos energía.
  • Cambia los filtros sucios y limpia los depósitos de polvo y basura de la aspiradora, esto hace que trabaje con mayor eficiencia. Una aspiradora consume 1.200 watts por hora.
  • Cierra bien la puerta del refrigerador para que no utilice energía de más, y cuando saques o guardes alimentos procura que no estén calientes y hazlo rápido. (JS)

Los últimos apagones no fueron en los 90, sino en 2009

En 2009, cuando Rafael Correa llevaba más de dos años como presidente de la República, Ecuador sufrió una crisis energética debido a la época seca o estiaje que afectó al país.

Correa declaró una emergencia eléctrica a principios de noviembre de ese año. A pesar de que el presidente había dicho que la crisis estaría controlada en 10 días, la situación se prolongó durante más de un mes y medio.

Los cortes de energía eléctrica duraron hasta febrero de 2010. Los sectores empresariales anunciaron que las pérdidas para el país por los apagones llegaron a $1.000 millones.