Quito, EFE
El canciller José Valencia aseguró que la III Reunión Técnica sobre la masiva migración venezolana que inauguró este lunes en Quito es una muestra del compromiso humanitario con los migrantes venezolanos.
«Este tercer encuentro es una demostración fehaciente del compromiso humanitario de nuestro país y de los Estados aquí presentes. Es un compromiso con los migrantes venezolanos en una situación muy particular de la movilidad humana», anotó.
En su intervención en el Palacio de Najas, sede de la Cancillería, el titular de la diplomacia ecuatoriana comentó que el compromiso se inició en Quito el año pasado y «da cuenta del interés de Ecuador y todos los países que acompaña esta reunión».
Se trata de la tercera cita de su tipo después de la realizada el 3 y 4 de septiembre de 2018, que tuvo como resultado la Declaración de Quito sobre Movilidad Humana, y la de los días 22 y 23 de noviembre de ese mismo año, que derivó en el «Plan de Quito».
Para Valencia, el evento es una prueba de la «voluntad política de los gobiernos para trabajar conjuntamente en los asuntos técnicos y humanitarios que demandan articular una respuesta coordinada para la crisis que se deriva en la más grande y súbita movilización migratoria registrada en América del Sur».
La cita, que terminará mañana, cuenta con la presencia de representantes de doce países participantes y de trece observadores, así como de agencias de Naciones Unidas y organismos internacionales y financieros.
Entre los países asistentes figuran Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Guatemala, México, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela, según la Cancillería.
Participa también el representante especial conjunto de Acnur y OIM para los refugiados y migrantes venezolanos, Eduardo Stein, quien destacó el apoyo de los países que «debe continuar de la manera decidida, articulada y solidaria que ha tenido hasta ahora».
Valencia recordó que la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) y de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) cifran en 3,5 millones de venezolanos que han salido de su país en los últimos cuatro años «afectados por una profunda crisis económica, política e institucional».
Y parafraseando a la alta Comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, señaló que «la magnitud de la gravedad de la repercusión de la crisis actual sobre los derechos humanos constituye un factor de desestabilización regional«.
Recordó asimismo que «solo en 2018 ingresaron a Ecuador más de un millón de venezolanos», de los que se han quedado en el país unos 250.000 y se ha otorgado más de 105.000 visas para garantizar «la incorporación segura y ordenada al país».
En medio de los difíciles estados económicos y presupuestarios que enfrenta Ecuador en la actualidad, agregó, «estamos conscientes de que un problema humanitario que tiene una proyección regional requiere acciones también regionales y a la par respuestas de cada Estado«.
Es «fundamental» coordinar acciones con la comunidad internacional y los organismos especializados, dijo Valencia antes de anotar que esa permanente preocupación llevó a Ecuador a asumir la presidencia del Foro Global sobre Migración y Desarrollo en diciembre pasado en Marruecos.
En el ejercicio de esa presidencia, Ecuador organizará la XII reunión cumbre del foro en noviembre próximo, en Quito.
El canciller reiteró también que su país «confía» en que la crisis económica e institucional de Venezuela encuentre «pronto una solución política sin el uso de la fuerza por medios pacíficos y democráticos entre todos los venezolanos».
Ello, a través de «la celebración de elecciones libres, transparentes y con observación internacional tan pronto como sea factible».
Esto permitirá -indicó- que avizoren un nuevo horizonte en su país «en el que no se reproduzcan las condiciones que les ha llevados a abandonar su patria masivamente».
Valencia agradeció al Gobierno de Argentina por su disposición a acoger en Buenos Aires la IV Reunión Técnica Internacional del Proceso de Quito, en una fecha aún por determinar.