Día quinto: Los Ángeles

SALUDO

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

ORACIÓN INICIAL

¡Oh, Divino Niño Jesús!, confiando en tu infinita misericordia y bondad quiero hacer esta novena para presentarte con sencillez mis necesidades espirituales y materiales. Cuando vivías entre los hombres, conversabas con tu padre celestial, en actitud confiada de adoración, alabanza, gratitud y petición. Así quiero que sea mi oración, especialmente en estos días de la novena. Tú eres nuestro intercesor ante el Padre; tú pediste por las necesidades de los hombres. Hoy te presento mis propias necesidades. Me acojo también a la intercesión de María, madre tuya y también mi madre, para que, como ella, me des fortaleza para aceptar y hacer siempre tu voluntad. Amén.

PRESENTACIÓN
DEL PERSONAJE
DEL DÍA

En la actualidad mucha gente habla de los ángeles, pero los presenta como seres mágicos, celestiales, que son capaces por ellos mismos de dar el bien o el mal. La visión cristiana es diferente. Los ángeles aparecen en la Biblia como aquellos seres que llevan una buena noticia de Dios a los demás.

LECTURA BÍBLICA

En la región había pastores que vivían en el campo y que por la noche se turnaban para cuidar sus rebaños. Un día se les apareció un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de claridad. Y quedaron muy asustados. Pero el ángel les dijo: “No tengan miedo, pues yo vengo a comunicarles una buena noticia, que será motivo de mucha alegría para todo el pueblo. Hoy, en la ciudad de David, ha nacido para ustedes un Salvador, que es el Mesías y el Señor. Miren cómo lo reconocerán: hallarán a un niño recién nacido, envuelto en pañales y acostado en un pesebre”. De pronto una multitud de seres celestiales aparecieron junto al ángel, y alababan a Dios con estas palabras: “Gloria a Dios en lo más alto del cielo y en la tierra paz a los hombres: ésta es la hora de su gracia”. Palabra del Señor.

MEDITACIÓN

En el lenguaje cotidiano, cuando a alguien se le compara con un ángel es porque ha hecho el bien a otro, y refleja en su vida el amor de Dios. Los ángeles van a anunciar a los más pobres la buena noticia del nacimiento de Jesús; son portadores de alegría y le muestran el camino a los demás para encontrar esta alegría. ¿Soy portador de buenas noticias para los demás? ¿Creo y celebro verdaderamente la buena noticia del nacimiento de Jesús?

Villancico
Bienvenido seas

Bienvenido seas, mi niño adorado
Bienvenido seas, mi niño de amor (bis)

Ángeles, santos por mi adoradle
al Dios y amante, nació en portal (bis)

Tiembla de frío, entre pajas y heno
mi dulce dueño, mi tierno amor

Verbo encarnado, flor de la altura,
fragante y suave, luz de Belén

Ángeles, santos por mi adoradle,
Al Dios y amante, nació en portal (bis)

Tiembla de frío, entre pajas y heno
mi dulce dueño, mi tierno amor (bis)

Bienvenido seas, mi niño
adorado
Bienvenido seas, mi niño
de amor (bis)

ORACIÓN FINAL

Acuérdate, ¡oh dulcísimo Niño Jesús!, que dijiste a la venerable Margarita del Santísimo Sacramento, y en persona suya a todos tus devotos, estas palabras tan consoladoras para nuestra pobre humanidad agobiada y doliente: “Todo lo que quieras pedir, pídelo por los méritos de mi infancia y nada te será negado”. Lleno de confianza en ti, ¡oh Jesús!, que eres la misma verdad, vengo a presentarte mis necesidades. Ayúdame a llevar una auténtica vida cristiana, para conseguir una eternidad feliz. Por los méritos infinitos de tu encarnación y de tu infancia, concédeme la gracia que te estoy pidiendo (aquí se expresa el favor que se quiere alcanzar). Me entrego a ti, oh Niño Omnipotente, seguro de que escucharás mi súplica y me fortalecerás en la esperanza. Amén.

SALUDO

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

ORACIÓN INICIAL

¡Oh, Divino Niño Jesús!, confiando en tu infinita misericordia y bondad quiero hacer esta novena para presentarte con sencillez mis necesidades espirituales y materiales. Cuando vivías entre los hombres, conversabas con tu padre celestial, en actitud confiada de adoración, alabanza, gratitud y petición. Así quiero que sea mi oración, especialmente en estos días de la novena. Tú eres nuestro intercesor ante el Padre; tú pediste por las necesidades de los hombres. Hoy te presento mis propias necesidades. Me acojo también a la intercesión de María, madre tuya y también mi madre, para que, como ella, me des fortaleza para aceptar y hacer siempre tu voluntad. Amén.

PRESENTACIÓN
DEL PERSONAJE
DEL DÍA

En la actualidad mucha gente habla de los ángeles, pero los presenta como seres mágicos, celestiales, que son capaces por ellos mismos de dar el bien o el mal. La visión cristiana es diferente. Los ángeles aparecen en la Biblia como aquellos seres que llevan una buena noticia de Dios a los demás.

LECTURA BÍBLICA

En la región había pastores que vivían en el campo y que por la noche se turnaban para cuidar sus rebaños. Un día se les apareció un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de claridad. Y quedaron muy asustados. Pero el ángel les dijo: “No tengan miedo, pues yo vengo a comunicarles una buena noticia, que será motivo de mucha alegría para todo el pueblo. Hoy, en la ciudad de David, ha nacido para ustedes un Salvador, que es el Mesías y el Señor. Miren cómo lo reconocerán: hallarán a un niño recién nacido, envuelto en pañales y acostado en un pesebre”. De pronto una multitud de seres celestiales aparecieron junto al ángel, y alababan a Dios con estas palabras: “Gloria a Dios en lo más alto del cielo y en la tierra paz a los hombres: ésta es la hora de su gracia”. Palabra del Señor.

MEDITACIÓN

En el lenguaje cotidiano, cuando a alguien se le compara con un ángel es porque ha hecho el bien a otro, y refleja en su vida el amor de Dios. Los ángeles van a anunciar a los más pobres la buena noticia del nacimiento de Jesús; son portadores de alegría y le muestran el camino a los demás para encontrar esta alegría. ¿Soy portador de buenas noticias para los demás? ¿Creo y celebro verdaderamente la buena noticia del nacimiento de Jesús?

Villancico
Bienvenido seas

Bienvenido seas, mi niño adorado
Bienvenido seas, mi niño de amor (bis)

Ángeles, santos por mi adoradle
al Dios y amante, nació en portal (bis)

Tiembla de frío, entre pajas y heno
mi dulce dueño, mi tierno amor

Verbo encarnado, flor de la altura,
fragante y suave, luz de Belén

Ángeles, santos por mi adoradle,
Al Dios y amante, nació en portal (bis)

Tiembla de frío, entre pajas y heno
mi dulce dueño, mi tierno amor (bis)

Bienvenido seas, mi niño
adorado
Bienvenido seas, mi niño
de amor (bis)

ORACIÓN FINAL

Acuérdate, ¡oh dulcísimo Niño Jesús!, que dijiste a la venerable Margarita del Santísimo Sacramento, y en persona suya a todos tus devotos, estas palabras tan consoladoras para nuestra pobre humanidad agobiada y doliente: “Todo lo que quieras pedir, pídelo por los méritos de mi infancia y nada te será negado”. Lleno de confianza en ti, ¡oh Jesús!, que eres la misma verdad, vengo a presentarte mis necesidades. Ayúdame a llevar una auténtica vida cristiana, para conseguir una eternidad feliz. Por los méritos infinitos de tu encarnación y de tu infancia, concédeme la gracia que te estoy pidiendo (aquí se expresa el favor que se quiere alcanzar). Me entrego a ti, oh Niño Omnipotente, seguro de que escucharás mi súplica y me fortalecerás en la esperanza. Amén.

SALUDO

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

ORACIÓN INICIAL

¡Oh, Divino Niño Jesús!, confiando en tu infinita misericordia y bondad quiero hacer esta novena para presentarte con sencillez mis necesidades espirituales y materiales. Cuando vivías entre los hombres, conversabas con tu padre celestial, en actitud confiada de adoración, alabanza, gratitud y petición. Así quiero que sea mi oración, especialmente en estos días de la novena. Tú eres nuestro intercesor ante el Padre; tú pediste por las necesidades de los hombres. Hoy te presento mis propias necesidades. Me acojo también a la intercesión de María, madre tuya y también mi madre, para que, como ella, me des fortaleza para aceptar y hacer siempre tu voluntad. Amén.

PRESENTACIÓN
DEL PERSONAJE
DEL DÍA

En la actualidad mucha gente habla de los ángeles, pero los presenta como seres mágicos, celestiales, que son capaces por ellos mismos de dar el bien o el mal. La visión cristiana es diferente. Los ángeles aparecen en la Biblia como aquellos seres que llevan una buena noticia de Dios a los demás.

LECTURA BÍBLICA

En la región había pastores que vivían en el campo y que por la noche se turnaban para cuidar sus rebaños. Un día se les apareció un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de claridad. Y quedaron muy asustados. Pero el ángel les dijo: “No tengan miedo, pues yo vengo a comunicarles una buena noticia, que será motivo de mucha alegría para todo el pueblo. Hoy, en la ciudad de David, ha nacido para ustedes un Salvador, que es el Mesías y el Señor. Miren cómo lo reconocerán: hallarán a un niño recién nacido, envuelto en pañales y acostado en un pesebre”. De pronto una multitud de seres celestiales aparecieron junto al ángel, y alababan a Dios con estas palabras: “Gloria a Dios en lo más alto del cielo y en la tierra paz a los hombres: ésta es la hora de su gracia”. Palabra del Señor.

MEDITACIÓN

En el lenguaje cotidiano, cuando a alguien se le compara con un ángel es porque ha hecho el bien a otro, y refleja en su vida el amor de Dios. Los ángeles van a anunciar a los más pobres la buena noticia del nacimiento de Jesús; son portadores de alegría y le muestran el camino a los demás para encontrar esta alegría. ¿Soy portador de buenas noticias para los demás? ¿Creo y celebro verdaderamente la buena noticia del nacimiento de Jesús?

Villancico
Bienvenido seas

Bienvenido seas, mi niño adorado
Bienvenido seas, mi niño de amor (bis)

Ángeles, santos por mi adoradle
al Dios y amante, nació en portal (bis)

Tiembla de frío, entre pajas y heno
mi dulce dueño, mi tierno amor

Verbo encarnado, flor de la altura,
fragante y suave, luz de Belén

Ángeles, santos por mi adoradle,
Al Dios y amante, nació en portal (bis)

Tiembla de frío, entre pajas y heno
mi dulce dueño, mi tierno amor (bis)

Bienvenido seas, mi niño
adorado
Bienvenido seas, mi niño
de amor (bis)

ORACIÓN FINAL

Acuérdate, ¡oh dulcísimo Niño Jesús!, que dijiste a la venerable Margarita del Santísimo Sacramento, y en persona suya a todos tus devotos, estas palabras tan consoladoras para nuestra pobre humanidad agobiada y doliente: “Todo lo que quieras pedir, pídelo por los méritos de mi infancia y nada te será negado”. Lleno de confianza en ti, ¡oh Jesús!, que eres la misma verdad, vengo a presentarte mis necesidades. Ayúdame a llevar una auténtica vida cristiana, para conseguir una eternidad feliz. Por los méritos infinitos de tu encarnación y de tu infancia, concédeme la gracia que te estoy pidiendo (aquí se expresa el favor que se quiere alcanzar). Me entrego a ti, oh Niño Omnipotente, seguro de que escucharás mi súplica y me fortalecerás en la esperanza. Amén.

SALUDO

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

ORACIÓN INICIAL

¡Oh, Divino Niño Jesús!, confiando en tu infinita misericordia y bondad quiero hacer esta novena para presentarte con sencillez mis necesidades espirituales y materiales. Cuando vivías entre los hombres, conversabas con tu padre celestial, en actitud confiada de adoración, alabanza, gratitud y petición. Así quiero que sea mi oración, especialmente en estos días de la novena. Tú eres nuestro intercesor ante el Padre; tú pediste por las necesidades de los hombres. Hoy te presento mis propias necesidades. Me acojo también a la intercesión de María, madre tuya y también mi madre, para que, como ella, me des fortaleza para aceptar y hacer siempre tu voluntad. Amén.

PRESENTACIÓN
DEL PERSONAJE
DEL DÍA

En la actualidad mucha gente habla de los ángeles, pero los presenta como seres mágicos, celestiales, que son capaces por ellos mismos de dar el bien o el mal. La visión cristiana es diferente. Los ángeles aparecen en la Biblia como aquellos seres que llevan una buena noticia de Dios a los demás.

LECTURA BÍBLICA

En la región había pastores que vivían en el campo y que por la noche se turnaban para cuidar sus rebaños. Un día se les apareció un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de claridad. Y quedaron muy asustados. Pero el ángel les dijo: “No tengan miedo, pues yo vengo a comunicarles una buena noticia, que será motivo de mucha alegría para todo el pueblo. Hoy, en la ciudad de David, ha nacido para ustedes un Salvador, que es el Mesías y el Señor. Miren cómo lo reconocerán: hallarán a un niño recién nacido, envuelto en pañales y acostado en un pesebre”. De pronto una multitud de seres celestiales aparecieron junto al ángel, y alababan a Dios con estas palabras: “Gloria a Dios en lo más alto del cielo y en la tierra paz a los hombres: ésta es la hora de su gracia”. Palabra del Señor.

MEDITACIÓN

En el lenguaje cotidiano, cuando a alguien se le compara con un ángel es porque ha hecho el bien a otro, y refleja en su vida el amor de Dios. Los ángeles van a anunciar a los más pobres la buena noticia del nacimiento de Jesús; son portadores de alegría y le muestran el camino a los demás para encontrar esta alegría. ¿Soy portador de buenas noticias para los demás? ¿Creo y celebro verdaderamente la buena noticia del nacimiento de Jesús?

Villancico
Bienvenido seas

Bienvenido seas, mi niño adorado
Bienvenido seas, mi niño de amor (bis)

Ángeles, santos por mi adoradle
al Dios y amante, nació en portal (bis)

Tiembla de frío, entre pajas y heno
mi dulce dueño, mi tierno amor

Verbo encarnado, flor de la altura,
fragante y suave, luz de Belén

Ángeles, santos por mi adoradle,
Al Dios y amante, nació en portal (bis)

Tiembla de frío, entre pajas y heno
mi dulce dueño, mi tierno amor (bis)

Bienvenido seas, mi niño
adorado
Bienvenido seas, mi niño
de amor (bis)

ORACIÓN FINAL

Acuérdate, ¡oh dulcísimo Niño Jesús!, que dijiste a la venerable Margarita del Santísimo Sacramento, y en persona suya a todos tus devotos, estas palabras tan consoladoras para nuestra pobre humanidad agobiada y doliente: “Todo lo que quieras pedir, pídelo por los méritos de mi infancia y nada te será negado”. Lleno de confianza en ti, ¡oh Jesús!, que eres la misma verdad, vengo a presentarte mis necesidades. Ayúdame a llevar una auténtica vida cristiana, para conseguir una eternidad feliz. Por los méritos infinitos de tu encarnación y de tu infancia, concédeme la gracia que te estoy pidiendo (aquí se expresa el favor que se quiere alcanzar). Me entrego a ti, oh Niño Omnipotente, seguro de que escucharás mi súplica y me fortalecerás en la esperanza. Amén.