El 70% de los ingresos dependen del Estado. Para la reactivación se realizarán campañas.
Desde 2015, el sector de la construcción ha tenido continuas caídas, a excepción de 2018 cuando hubo una pequeña recuperación. Para 2021, según proyecciones del Banco Central del Ecuador (BCE), ese sector será el único, junto con el Estado, que tendrá una reducción de entre el 1,5% a 3%.
Joan Proaño, vocero de Constructores Positivos, explicó que el 70% de la actividad depende directamente de la inversión y obra pública, por lo que cualquier intento de recuperación o de reducción del impacto negativo de la crisis, solo podrá darse a través del fomento de las operaciones inmobiliarias (30%).
“Sabemos que ha habido y seguirá habiendo contracción en la obra pública y eso continuará afectando al sector. En la parte inmobiliaria, a pesar de la gran caída que tuvimos al inicio de la pandemia, sí se ha visto una pequeña recuperación desde agosto”, acotó.
Entre marzo y mayo se experimentó un 60% menos de reservas en proyectos habitacionales; sin embargo, desde agosto, se recuperó casi la mitad de esa reducción, es decir, se pasó al 29% menos. La expectativa es que se mantengan o incluso se mejore en algo esos niveles hasta terminar el año.
Aprovecha comprando una casa
Proaño recalcó que la principal estrategia para iniciar la paulatina reactivación del sector, durante 2021, es poner todo el énfasis en mejorar la demanda. En otras palabras, se van a llevar a cabo campañas, con fondos del sector privado, para que la ciudadanía conozca los beneficios que tiene una vivienda propia, y que es el mejor momento para ese tipo de inversiones.
“Nunca habíamos tenido tasas tan bajas. Las viviendas de interés público e interés social se pueden financiar a una tasa subsidiada del 4,99%, es decir, menos de la mitad del costo normal que es del 10,3%”.
Román Morrillo, empresario constructor, puntualizó que, en esas condiciones, se logra que la cuota del crédito hipotecario sea muy similar al valor de un arriendo. (Ver recuadro)
Alrededor $1.000 millones disponibles
Las tasas de interés subsidiadas son posibles porque, a finales del año pasado, el Gobierno constituyó un fideicomiso, con $1.350 millones, para dar créditos hipotecarios en condiciones especiales. De ese monto, solo se ha colocado $300 millones, por lo que hay un poco más de $1.000 millones disponibles.
El fideicomiso se conformó con 40% de recursos del Gobierno, con el aval de organismos multilaterales ($538 millones); y 60% de fondos del Banco Pacífico y las Mutualistas Pichincha y Azuay (810 millones).
“Todavía hay mucho desconocimiento sobre este financiamiento barato. Debe haber un mejor trabajo conjunto entre sector público y privado para que se incremente la construcción de viviendas”, aseveró Morillo.
Trámites demorados
Además, otra gran fuente de recursos es el Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess), donde se pueden encontrar hipotecarios con una tasa del 5,99%; pero se debe trabajar en la eficiencia, debido a que los trámites se están demorando, al menos, un 30% más que antes de la pandemia.
Oportunidad de oro
- Por una casa de $60.000 se tendría que pagar $365 mensuales y por una de $83.000, la cuota sería de $515.
- La entrada es del 5% del valor del inmueble, pero no se la debe desembolsar de una sola, sino paulatinamente, conforme avance la construcción.
Las tasas de interés subsidiadas aplican para viviendas de $40.000 a $70.000 (interés público) y $70.000 a $90.000 (interés social).
27.000 EMPLEOS se han creado de enero a octubre de 2020.
Y se han perdido 61.000.