‘Comisión de la Verdad abonará a la justicia’

“La violencia no resuelve nada y la incomunicación es un medio para la tortura”, Elsie Monge, CEDHU.
“La violencia no resuelve nada y la incomunicación es un medio para la tortura”, Elsie Monge, CEDHU.

La Comisión de la Verdad aún no empieza su trabajo de forma oficial. La demora depende del presupuesto que entregue el Ministerio de Economía.

Según la hermana Elsie Monge, de la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos (CEDHU) e integrante de la Comisión de la Verdad, se estima que en un plazo máximo de mes y medio se cuente con los recursos para comenzar de inmediato con las investigaciones de casos de violación a los derechos humanos suscitados desde 1984 hasta la fecha.

Si bien los encomendados determinarán indicios de responsabilidad, su labor terminará el momento en que se remitan las pruebas a las autoridades judiciales para que sancionen a los implicados.

Por tener una connotación nacional el caso ‘Roldós’ (1981) no se descarta que sea investigado. Monge habló así con LA HORA:

¿Un mes de creación cumple la Comisión de la Verdad y no hay nada aún?

No estamos aún en funciones debido a que el decreto dice que el tiempo comenzará a correr desde el momento en que se instale la comisión en una oficina y se disponga de los recursos necesarios para poder funcionar durante nueve meses. Pero estamos reuniéndonos semanalmente.

¿De qué se ocupa al momento la comisión?

Se prepara un plan estratégico en el que se defina qué es lo que podemos y vamos a hacer. Y luego estableceremos un Reglamento interno.

¿Se ha repartido el trabajo?

Contamos con un organigrama en el que se repartiría el trabajo en los siguientes grupos: investigación y jurídico, comunicacional, y administrativo – financiero. No se descarta la contratación de más personal.

¿Será una comisión persecutoria?

La comisión es de investigación y no un tribunal y lo que tenemos que hacer es recabar información acerca de hechos que por un lado no han sido judicializados, pero que atentan contra la vida e integridad de las personas. Para ello, se efectuará también trabajo de campo.

¿Qué hacer para desentrañar la verdad?

Se desclasificarán los documentos reservados para averiguar toda la verdad y tratar de conseguir pruebas.

¿De dónde saldrán esas pruebas?

Saldrán de archivos de la Policía, Inteligencia Militar, COSENA y otros organismos. Posteriormente esas pruebas pasarán a la Función Judicial, la cual definirá si se inicia o no un juicio.

¿Cómo se clasificarán los casos?

Todo eso es parte de la estrategia y en nueve meses tratar todas las violaciones más graves de derechos humanos desde 1984 hasta el presente es imposible. Hay que priorizar de acuerdo a las posibilidades de documentar lo suficiente para desentrañar la verdad y que eso desemboque en la Función Judicial que permita combatir la impunidad y sancionar.

¿Se empezará por casos que tienen historial judicial y connotación nacional?

Se buscarán los casos en donde se pueda contar con pruebas suficientes para descubrir la verdad y que la justicia haga lo suyo.

Existen casos como: ‘Restrepo’ y ‘Benavides’ que han llevado un proceso judicial, incluso ante organismos internacionales, pero que aún falta por saber si se investigó o no a profundidad.

Se ha pedido también que el caso ‘Roldós’ sea analizado por su trascendencia nacional.

¿Modelos de otros países serán utilizados?

Se está tomando contacto con otras comisiones de la verdad de países como: Chile, Argentina y Perú, para tener ciertas pautas y delimitar los casos que se van a analizar.

En el caso de Chile la comisión investigó solo desapariciones y asesinatos, por lo que es vital ver la realidad del país.

¿Centrarán su trabajo en el período de LFC?

El período de 1984 a 1988 tiene de particular que se instituyó la represión como política de Estado, pero no termina con ese Gobierno.

¿Acaso el SIC dejó rezagos?

Recordemos que el Servicio de Investigación Criminal (SIC) si no me equivocó desapareció en 1995, solo de nombre, porque luego se creó la Oficina de Intervención del Delito (OID) y en la actualidad existe la PJ a la orden del Ministerio Público, de la que también se tienen denuncias.