El presidente Javier Milei especificó, ayer, que el intercambio de divisas extranjeras dejó de ser considerado un delito, aunque aclaró que aún no puede levantar las restricciones cambiarias, conocidas como cepo.
Redacción BUENOS AIRES
El presidente de Argentina, Javier Milei, aseguró este 21 de diciembre en una entrevista radiofónica que la compra y venta libre de dólares y otras divisas extranjeras dejó de ser un delito y ya no se «persigue» en el país; esto tras la firma la víspera de un amplio decreto con medidas económicas.
«Hoy en el mercado libre podés comprar todo lo que se te dé la gana y nadie te va a perseguir. Hoy vas y comprás los dólares que querés y nadie te va a perseguir por eso» (sic), reiteró el mandatario a radio Rivadavia.
Milei consideró que esta medida, incluida en el plan de choque anunciado la noche del miércoles en una cadena televisiva nacional, «es un mecanismo que va a permitir que rebote la actividad económica«.
«Sacar el cepo (la restricción a la compra o adquisición de divisas extranjeras en Argentina) es un mecanismo que va a permitir que rebote la actividad económica, pero nosotros no podemos abrir el cepo mientras que no estén dadas las condiciones de poder aguantar un cambio de portafolio abrupto«, matizó el libertario.
Como parte de estos cambios, el decreto de necesidad y urgencia (DNU) deroga, entre otras normas, la controvertida Ley de Alquileres, ofreciendo la posibilidad de que las transacciones comerciales en este mercado puedan pactarse en cualquier moneda; un hecho que, como mucho de lo que sucede en Argentina, ya ocurre extraoficialmente.
De hecho, lo mismo ocurre desde hace años con la compra y venta de dólares blue (informales), que se adquieren y venden libremente en Buenos Aires y el resto del país a precios diferentes al cambio oficial; esto a pesar de que, en la ley, se trataba de una actividad restringida.
Los ‘arbolitos’ y las ‘cuevas’, nombre con el que se conocen los lugares donde se venden y compran dólares informales y otras monedas extranjeras, forman parte del paisaje cotidiano de la capital argentina.
Incomprensión presidencial por las protestas
Entre tanto, el jefe de Estado argentino se mostró sorprendido por las protestas realizadas el 20 de diciembre por organizaciones de izquierda y ciudadanos en contra de las medidas económicas que ha adoptado.
Sobre ellos, el presidente Javier Milei aseguró que «no estaban muy al tanto de lo que significaba» esta batería de desregulaciones.
Y a pesar de los «cacerolazos» y concentraciones callejeras ocurridas, «está claro que la mayoría de la gente coincide con lo que el Gobierno está haciendo«, declaró este jueves el portavoz de la Presidencia, Manuel Adorni.
«Hay gente que no va a estar de acuerdo (…), pasa en cualquier Gobierno», minimizó el vocero presidencial. «Cada uno tiene el derecho de manifestarse como le parezca mejor, siempre que lo haga dentro de la ley«, insistió. (EFE)