Inseguridad alimentaria creció 60% en Latinoamérica en siete años

Pobreza. Personas en situación de calle en Buenos Aires (Argentina) reciben alimentos. EFE
Pobreza. Personas en situación de calle en Buenos Aires (Argentina) reciben alimentos. EFE

Las personas que sufren subalimentación también aumentaron en la región, de un 5,8% de la población en 2014 a un 8,6% en 2021.

Redacción SANTIAGO DE CHILE

La inseguridad alimentaria en Latinoamérica creció en un 60% entre 2014 y 2021, hasta abarcar un 40,6% de la población de los países de la región, superando en más de diez puntos la media global, que se sitúa en 29,3% de la población mundial, informaron este 6 de diciembre de 2022 organismos internacionales en Santiago de Chile.

Según un informe presentado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la Organización de las Naciones Unidas para Alimentación y la Agricultura (FAO) y Programa Mundial de Alimentos (WFP), las personas que sufren subalimentación también aumentaron en la región, de un 5,8% de la población en 2014 a un 8,6% en 2021.

La inseguridad alimentaria golpea especialmente las zonas rurales de Latinoamérica, que registran un 44,3% de incidencia de pobreza, 15 puntos más que en las zonas urbanas, de acuerdo al documento.

Los tres organismos internacionales alertaron que las sucesivas crisis económicas internacionales y la invasión rusa en Ucrania hicieron crecer fuertemente la inflación de los productos alimentarios, afectando negativamente las cadenas latinoamericanas de producción agropecuaria.

Efectos de la inflación

Los precios de los alimentos y bebidas en la región escalaron hasta un 12,4% la variación interanual en septiembre de 2022, cuatro puntos porcentuales por encima del IPC mundial.

Además, la disminución de los precios internacionales de los alimentos entre abril y octubre de 2022 no se trasladó a una caída equivalente de los precios en los países de la región, remarcó el texto.

«A pesar de contar con un importante superávit comercial agropecuario, América Latina y el Caribe está expuesta a los problemas de producción y comercialización y a las alzas de precios derivados de la guerra en Ucrania», dijo José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la Cepal.

La mayoría de los países latinoamericanos y caribeños son vulnerables a los vaivenes de los precios internacionales de los alimentos, porque son importadores netos de muchos productos básicos.

Por ello, Cepal, FAO y WFP reclaman a los Estados «respuestas de emergencia» para mejorar el acceso a los alimentos de la población de la región y mantener la producción agrícola local, como la reducción de aranceles y la diversificación de fuentes de las importaciones clave. EFE

26 países de la región son altamente dependientes de las importaciones de trigo, y 13 de maíz.

Más políticas para la agricultura familiar

Los Estados y los Gobiernos tienen que facilitar, con políticas públicas, la agricultura familiar, un sector esencial para la economía mundial y clave en la lucha contra la pobreza, la emergencia climática y la inseguridad alimentaria que amenaza a millones de personas en el planeta, advirtió Mario Lubetkin, director regional de la FAO para Latinoamérica y el Caribe.

El responsable uruguayo subrayó que los resultados demuestran que la agricultura familiar «tiene una capacidad extraordinaria de multiplicar, de racionalizar y de preservar, quizá mejor que otras formas de explotación, una sustentabilidad futura».