Carmita Cueva, una madre dedicada a su familia

Carmita Cueva, una madre dedicada a su familia
FORTALEZA. Carmita junto a sus tres hijos y esposo.

Es madre, esposa, estudiante y emprendedora. Son múltiples oficios que la vida le concedió.

Cada vez son más las mujeres que deciden separarse del miedo para hacer realidad sus sueños. Hoy en día, es común observar a madres que crean sus propias empresas como muestra de superación. Sin duda, esta es una estupenda noticia, ya que históricamente se ha asociado el éxito empresarial a personas de sexo masculino.

Esto significa que, aunque queda mucho camino por recorrer, las mujeres siguen luchando por vencer las barreras del día a día. Un claro ejemplo de ello es Carmita Cueva, dermatocosmiatra y esteticista en Loja, quien tiene una historia que contar.

Carmita es madre de tres niños: José Eduardo, Matías y María Pía. Desde su experiencia, “ser mamá es la maestría de vida más grande que toda mujer puede tener”, lo que requiere de compromiso, sacrificio y responsabilidad.

Además de papel como madre y esposa, estudia la carrera de Nutrición y Dietética, la cual se complementa con su área de especialización. Asimismo, trabaja en su propia empresa dermatológica y está próxima a lanzar su marca de productos dermocosméticos para el cuidado facial. Esto le demuestra que los sueños se hacen realidad cuando se trabaja desde una visión de servicio.

Carmita Cueva, una madre dedicada a su familia
PROFESIÓN. La dermatología es su pasión. Le gusta permanecer en constante aprendizaje.

¿Cómo es su rutina?

Me levanto todos los días a las 05:00 para entrenar atletismo con el grupo Las Gacelas Running Team. A las 06:00 regreso a casa para dar el desayuno a mis hijos y alistarlos para la escuela. A las 07:00, junto con mi esposo, los llevamos al centro educativo al que asisten. Luego, voy a la universidad dependiendo de los horarios. Cuando no tengo clases, aprovecho para ir a mi trabajo en el Consorcio Médico y atender a los pacientes. Ya en horas de la tarde y noche, me dedico a hacer mis tareas de la universidad y ayudo con los deberes de mis hijos, y, esta manera, terminamos la jornada.

¿Cómo logra organizarse con todas sus actividades?

Lo primordial es tener un horario para cada cosa. Tengo la suerte de que cuento con un esposo que me apoya en todo, y juntos colaboramos con nuestros hijos.

Ser madre, estudiante y trabajar conlleva un gran sacrificio, pero con disciplina todo es posible.

¿Cuál es su experiencia como mamá?

Siempre trato de estar al pendiente de mis hijos. Ellos también son deportistas y me gusta llevarlos a sus entrenamientos de básquet, fútbol o ajedrez. Trato de guiarlos correctamente para que mantengan su mente ocupada en cosas que realmente valen la pena. Quiero que mis hijos sientan que su madre ama el deporte y que siempre estará para darles un consejo.

Pese a las ocupaciones, nos gusta darnos un momento para dialogar. Disfrutamos de hacer viajes juntos y de vivir cada instante con buena energía.

¿Qué es lo que aprendió de sus padres y ahora enseña a sus descendientes?

Aprendí de ellos la disciplina, el trabajo, la responsabilidad y amor al deporte. Mis padres me enseñaron que los sueños se cumplen, algo que trato de transmitir a mis hijos para que nunca se desanimen.

Como madre, me siento orgullosa de mis pequeños y siempre estará dispuesta a ayudarlos. Ellos son mi motivación.

 

TOME NOTA

La disciplina y constancia son las claves de su éxito.