El Baño del Inca y el Bosque Petrificado de Puyango son dos lugares para aprender y realizar actividades.
Saraguro
Es un cantón de la provincia de Loja que se caracteriza por su riqueza cultural, hermosos paisajes y amabilidad de la gente. Cada vez son más las personas que planean viajes a este destino, debido a que ofrece diferentes atractivos para salir de la rutina y mantener contacto con la naturaleza.
En su geografía resaltan llanuras y majestuosas montañosas que son hogar de exótica flora y fauna. Las elevaciones rocosas, riachuelos, cascadas y lagunas naturales, son algunas de las opciones que motivan a los turistas de todo el país a emprender su viaje a Saraguro y disfrutar de sus bondades.
Baño del Inca
Ubicado en la comunidad de Ñamarin, a un lado de la vía que conduce a Cuenca, se encuentra este imponente atractivo. Para llegar a la entrada del Baño del Inca se puede hacer una caminata de 15 minutos desde el centro de Saraguro, mientras que en carro o bicicleta el tiempo de traslado se reduce a tan solo cinco minutos. Luego se debe realizar un recorrido de 30 minutos por un sendero rodeado de verde vegetación hasta llegar al destino.
En el sitio existen dos atractivos principales que llaman la atención: una cascada de 60 metros de altura donde los ancestros creen que Atahualpa tomaba sus baños al venir a la sierra ecuatoriana, mientras que, por otra parte, están las cuevas del Baño del Inca que consisten en un conjunto de grandes rocas que forman una serie de cuevas que eran utilizadas como trincheras en épocas de guerra, según lo señala la historia. En la actualidad, pobladores de Saraguro llegan al sitio para cumplir con rituales de sanación, tal como lo hacían antiguas generaciones, aunque no con la misma frecuencia.
Baño del Inca está rodeado de varias especies de aves como: el águila pechinegra, el colibrí gigante, la estrellita, el mirlo grande, el mirlo chiguanco y el picogrueso, asimismo, se pueden encontrar diferentes tipos de orquídeas.
Algunas de las actividades a disposición de los turistas son: baño de purificación, senderismo y fotografía de paisajes. Los amantes del camping pueden colocar sus carpas, hacer fogatas, e incluso preparar alimentos, siempre y cuando no se arroje basura y se sofoque el fuego al concluir la actividad. Quienes se decidan por acampar deben tomar en cuenta que las temperaturas de Saraguro disminuyen en la noche, por lo que es recomendable llevar ropa abrigada.
Puyango
El cantón Puyango está ubicado en la frontera suroccidental de la provincia de Loja, a 214 kilómetros de la capital provincial. Gracias a la diversidad de pisos climáticos posee una temperatura templada húmeda en la parte alta, y cálida seca en los valles, lo que favorece la producción agropecuaria en sus seis parroquias.
Puyango toma su nombre del río principal que lo riega, el mismo que proviene de la palabra quechua palta que significa Puyu, y que hace referencia a un río nublado, boscoso y musgoso. Hoy en día, este cantón es popularmente conocido como la tierra del arte, miel y café.
Bosque Petrificado de Puyango
Es uno de los atractivos más excepcionales con los que cuenta Ecuador, donde se han efectuado múltiples investigaciones nacionales e internacionales. Tiene un área protegida de 2.659 hectáreas compartidas entre las provincias de El Oro y Loja. El 9 de enero de 1987 fue declarado bosque y un año después como Patrimonio Cultural Nacional durante el gobierno de León Febres Cordero.
El Bosque Petrificado es mundialmente conocido como yacimiento de fósiles marinos y árboles petrificados, lo que deriva en una importante afluencia turística. Troncos, hojas y varias especies de invertebrados, tales como bivalvos, amonites y equinodermos, se exhiben en el cálido bosque y en su Museo principal.
Esta zona fue antiguamente ocupada por un mar, puesto que en el territorio se han hallado fósiles vegetales y de organismos marinos como conchas, caracoles y tortugas, aunque también hay huesos de dinosaurios. Las teorías evolutivas apuntan a que el océano se secó y se pobló por bosques y animales que fueron sepultados para que posteriores movimientos geológicos propios del planeta los arrojen a la superficie como árboles caídos.
La mejor temporada para visitar el Bosque Petrificado es la época seca que inicia en mayo y concluye en diciembre de cada año. Los turistas que decidan viajar al lugar harán un recorrido por diferentes senderos llenos de historia y curiosidad. Una vez concluido el trayecto, pueden degustar del tradicional jugo de caña (guarapo), probar la exquisita gastronomía y bañarse en las frescas quebradas localizadas a escasos minutos de la zona. Cabe destacar que el ingreso al lugar tiene el precio de un dólar por persona.
El Bosque Petrificado es hogar de más de 130 especies de aves; en mamíferos los turistas pueden observar: venados, zorros, armadillos, guatusas, así como reptiles: serpientes, iguanas y lagartijas. Algunas de las plantas que predominan son el amancay, bejucos, orquídeas, chaquiro, guayacanes, laureles, guásimos y caciques.
TOME NOTA Hasta el Baño del Inca llegan turistas e investigadores extranjeros. EL DATO Los troncos de piedra de Puyango datan de entre 100 millones y 65 millones de años.