Ley de la Atracción: cómo conseguir lo que deseas sin problemas

Cada persona tiene su propia ‘varita mágica’ llamada la “Ley de Atracción». Es la segunda ley del universo que nos permite obtener lo que queremos de forma rápida, segura y cómoda. 

Su cumplimiento requiere: falta de miedos, una comprensión clara de lo que queremos y el estado emocional correcto. Es decir, necesitamos una energía especial para atraer lo que queremos a la vida. Hoy hablaremos de lo que es esta energía y cómo desarrollarla.

La naturaleza nos ha dado la oportunidad de desarrollar la habilidad de definir los deseos, y a veces muchos deseos, y atraerlos a nuestras vidas en el momento necesario.

La energía solo vive en un cuerpo sano

Necesitas un cuerpo sano y fuerte. Cuanto más saludable sea tu cuerpo, más energía será capaz de conducir a través de sí mismo. Imagina que tu cuerpo es un cable a través del cual pasa la corriente eléctrica. Cuanto más potente sea este cable, más energía puede llevar a través de sí mismo. La energía es el constructor de tu deseo. Si tu cuerpo está sano y fuerte, viene mucha energía y el deseo se hace realidad más rápido.

Las personas con cuerpos fuertes son capaces de soportar un gran estrés emocional. Soñando, tensamos nuestro sistema nervioso, que afecta a las reacciones psicosomáticas. Un cuerpo con problemas (débil o enfermo) bloquea inmediatamente los impulsos nerviosos, evitando la tensión. Para encontrar la forma más corta de cumplir su deseo, debe pasar por varias etapas de tales tensiones. A menudo, el propio cuerpo detiene la actividad intelectual y, como resultado, la mente emite un «IMPOSIBLE» conciso.

Un cuerpo sano evita fácilmente la tensión y la mente es capaz de dar, solo queda por descubrir cómo hacerlo. Cuanto más fuerte es tu cuerpo, más rápido viene la reconciliación de la mente para cumplir el deseo.

Observación profesional: si el cerebro ha gastado mucha energía en el proceso de buscar la posibilidad de cumplir algún deseo, es más probable que te convenza de que es imposible cumplirlo. Las personas con buena salud y una buena circulación sanguínea gastan menos energía en la comprensión del deseo y lo cumplen más rápido. La ley de la atracción funciona perfectamente para esas personas.

La velocidad del cumplimiento de lo deseado también está influenciada por las creencias y miedos de una persona. A veces pasa que una persona se convence a sí misma de que su deseo debería cumplirse hace mucho tiempo. En el proceso de trabajo personal, resultó que tenía un miedo interior de que definitivamente sería castigado por el rápido cumplimiento del deseo. El miedo alimentó la creencia: «Es imposible conseguir algo rápidamente de una manera honesta», y si es imposible, entonces definitivamente habrá algunas consecuencias negativas. Si tus deseos no se cumplen rápidamente, piénsalo, tal vez tengas miedo de la responsabilidad ilusoria.

Y tu ‘estado emocional promedio’ también afectará a la velocidad del rendimiento. Es decir, cuánto tiempo mantendrás un estado de inspiración en el proceso de cumplir tu deseo. Cuanto más tiempo estés en un estado hermoso e inspirado, antes se hará realidad el deseo.

Respetar al medio ambiente y a los demás.

Si hay que tener el respeto hacia el medio ambiente. Por aquí lea las reglas para evitar las consecuencias tóxicas de tus deseos:

– Tu deseo no debe alterar el libre albedrío de alguien. Nunca hagas deseos que provoquen o obliguen a otras personas a hacer algo por ti, especialmente en asuntos de amor. Puedes pedir un deseo: «Quiero que Raúl esté conmigo y me ame», y al final funcionará como un hechizo bajo ciertas condiciones. La cosa es peligrosa y puede tener consecuencias para ti y para Raúl también. Si quieres estar con una persona en particular, pero algo no encaja, solo adivina a cualquier hombre con el que puedas experimentar los mismos sentimientos fuertes. Lo mismo con los jefes en el trabajo, los colegas, los familiares y cualquier persona.

– El deseo debe estar dirigido exclusivamente a ti. La explicación anterior justifica este párrafo.

– No tienes que sacrificar nada para cumplir tu deseo. No vivimos en tiempos de sacrificios u ofrendas a los dioses. Si sacrificas algo por tu deseo, no traerá alegría, sino que exigirá más y más sacrificios.

– Realiza tus deseos. Una de las principales razones para romper la segunda ley del Universo (la Ley de la Atracción) es seguir los deseos de otras personas. A menudo se nos ocurre la idea de copiar el deseo de otra persona. Esto generalmente conduce únicamente a la decepción y a una distancia aún mayor del cumplimiento de sus verdaderos deseos. Deben ser sólo suyos.  El deseo es una luz en nuestro camino de vida. Si sigues tus deseos, obtienes energía, alegría y la experiencia. Si vas a la luz de otra persona, corres el riesgo de perderte. Sigue tu propio camino, diviértete, y así sin duda obtendrás lo tuyo y solo tuyo. (T.S)