Esmeraldas despidió al hombre más rápido del Ecuador, Álex Quiñónez Martínez, hasta su última morada en el Cementerio General de la ciudad.
En medio de aplausos, profundas muestras de dolor y también de indignación por su cruel asesinato, fue despedido el atleta esmeraldeño Álex Quiñónez ‘El Clon’, la tarde ayer domingo 24 de octubre en la ciudad de Esmeraldas.
Como parte del protocolo establecido para su despedida, se realizó una capilla ardiente en el estadio Folke Anderson, donde estudiantes de la Federación Deportiva de Esmeraldas de varias disciplinas esperaban el cuerpo de ‘El Clon’, para recibirlo con una entrada de honor. Asimismo, amigos, vecinos y familiares se volcaron hasta el lugar, y desde las gradas le aplaudían a un grande que partió.
De la misma manera, varios funcionarios del deporte esmeraldeño, el Ministro de Deportes, Sebastián Palacios, el atleta Jefferson Pérez y otras instituciones se dieron cita para ser parte de la oración fúnebre para honrar a Álex en su despedida.
Piden justicia
Sus familiares quienes iniciaron la intervención y recitaron poemas en el acto, también hicieron sus peticiones al Gobierno y al Ministerio de Deportes para que se haga justicia en este caso y haya la retribución económica por parte de Estado hacia su madre y sus tres hijos menores de edad que quedan en la orfandad.
Ante esto, el ministro de Deportes Sebastián Palacios, se comprometió en conversar con la familia del atleta para escucharlos e iniciar con las gestiones para que haya el apoyo hacia su madre y sus hijos. “El Gobierno no los dejará solos, yo me comprometo en realizar las conexiones con el Presidente para que la pensión de Álex sea retribuida a sus familiares”, sostuvo.
Luego, sus amigos y familiares lo retiraron de la capilla para hacerle la vuelta olímpica en el estadio Folke Anderson, lugar donde inició su carrera. En hombros de sus amigos y amigas fue llevado hasta su última morada en el Cementerio General de la ciudad, pero antes recorrieron las principales calles, acompañado con cánticos y bailes.
«Esta muerte quedará en las autoridades y deben lograr que se esclarezca este acto criminal. Si la justicia no se da en la tierra, que venga la justicia de Dios», manifestó Jefferson Quintero, amigo de Álex, mientras entraban al cementerio.
En la entrada al camposanto las lágrimas de sus familias y amigos no se hicieron esperar, un ambiente de dolor se vivió el Cementerio General mientras el cuerpo estaba ingresando a la bóveda, ubicada al lado del héroe Luis Vargas Torres, donde Álex descansará.
Una vez terminado el entierro sus familiares se retiraron desconsolados por la pérdida de su hijo, hermano, padre y amigo.
En una entrevista a Diario La Hora, la madre del velocista esmeraldeño, Ana Quiñónez, expresó: “cuando me mataron a mi hijo, me quitaron la mitad de mida, he quedado desamparada y con problemas en mi salud. Lo que pido al Gobierno es que se haga justicia y se encuentre a los culpables. Porque aquí queda su madre quien va a llegar hasta las últimas consecuencias”.
Asimismo, describió a Álex como su morito, a quien desde muy pequeño lo crío con amor y con sacrificio para que fuera un hombre de bien. “Mi hijo se merece lo mejor, y todas las instituciones le dieron la espalda. Yo estuve cuando mi morito se deprimió una vez que lo dejaron sin su mensualidad y sin el apoyo para sus competiciones”, dijo. (MFC)