Advierten de una nueva etapa caudillista, muy a lo bolivariano, del Presidente de España

consulado Guayaquil
El presidente de España, Pedro Sánchez. (Europa Press)

Luego de cinco días de reflexión sobre si se quedará o no en la Presidencia, Pedro Sánchez dijo que seguirá. Sus contradictores alertan de una deriva caudillista del Presidente de España por hacer de un asunto judicial familiar, algo estatal. 

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado en una declaración institucional desde el Palacio de la Moncloa que continuará al frente el Ejecutivo. «He decidido seguir», ha anunciado, al tiempo que ha señalado que esta decisión es «un punto y aparte» y ha llamado a la movilización.

Todo esto luego de investigaciones abiertas a su esposa Begoña Gómez por un presunto tráfico de influencias.

Pese a los pedidos de que renuncie, él seguirá y se han encendido las alertas de una posible deriva caudillista de Sánchez.

Por ejemplo, el expresidente del Gobierno y presidente de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), José María Aznar, ha acusado al actual presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, de suplantar el contenido institucional de la Presidencia del Gobierno por una «comedia de caudillismo lacrimógena», a la vez que ha tildado su discurso como una «gigantesca burla democrática» al «más puro estilo del populismo peronista».

«Hemos visto vaciarse la presidencia del Gobierno de contenido institucional para ser suplantada por una comedia de caudillismo lacrimógena», ha declarado este lunes el ex presidente Aznar en la clausura del ciclo ‘Estado de derecho y promoción de la democracia’, organizado por FAES, donde ha explicado que la actuación de Sánchez en los últimos días ha supuesto hacer «rehén a la opinión pública» y someterla a «un chantaje a plazo».

Así, ha mantenido que se han hecho pasar «la apertura de unas meras diligencias judiciales de investigación como un detonante de una crisis sistémica» con el objetivo de verter «acusaciones intolerables contra medios de comunicación». Todo ello, ha denunciado, apunta a la causa «real» del anuncio de Sánchez: «Una España materialmente ingobernable» por diversas causas, entre las que ha destacado «la tramitación de una amnistía inconstitucional, imposible e improbable».

De esta forma, ha sostenido que el país se encuentra sumergido en un «clima de volatilidad» en el que ha prosperado «la fascinación por los liderazgos populistas», al tiempo en que «se ponen en cuestión las premisas del Estado de derecho». Además, ha mantenido, el populismo ataca a «los contrapesos» del Estado, de los cuales ha dicho, «no están de moda».

Santiago Abascal, líder de Vox dice que «lo peor está por llegar»

El líder de Vox, Santiago Abascal, considera que la decisión del presidente, Pedro Sánchez, de continuar al frente del Ejecutivo es «una huida hacia adelante» que «reafirma su golpe contra la convivencia, el Estado de Derecho, la separación de poderes y la libertad de prensa», al tiempo que ha augurado que «lo peor está por llegar».

Así se ha expresado Abascal en una breve declaración sin preguntas desde la sede nacional de Vox, donde ha reprochado al jefe del Gobierno que estos cinco días de meditación sobre su continuidad han sido «un teatro burdo, indignante y victimista» que ha sumido a España «en un bochorno internacional de dimensiones y consecuencias absolutamente incalculables».

De forma paralela, ha afeado a Sánchez no poder exhibir «una postura menos democrática» a pesar de haber «identificado a su persona con la democracia», lamentando el llamamiento del presidente a la «movilización social».

Cree que el objetivo último es «sepultar la crítica y garantizarse la impunidad». «La comparecencia es una amenaza a todo disidente», ha añadido, mencionando específicamente a «jueces independientes, medios libres y oposición».

El líder de Vox también ha aprovechado para arremeter contra los socios de investidura de Sánchez, asegurando que su comparecencia refuerza «la triple alianza de comunistas, socialistas y nacionalistas, todos ellos enemigos de las libertades y la unidad nacional».

Cree, asimismo, que los citados le acompañarán en las movilizaciones y la «supuesta regeneración democrática» para «atizar el enfrentamiento social». «Sabemos que sus cómplices de investidura acaban convirtiendo siempre la movilización en violencia que Sánchez terminará amnistiando», ha continuado.

Todos ellos, «han roto la realidad» y lo que han causado es «el enfrentamiento de la izquierda y la extrema izquierda, azuzar odios, desenterrar muertos» en una España «anegada por la corrupción política que dio lugar a su investidura y la corrupción económica que ahora quieren tapar con total impunidad». (Europa Press)