Escasea el agua

La Constitución contempla el derecho humano al agua y la considera un patrimonio nacional estratégico. En teoría, Ecuador tiene suficientes reservas de agua para abastecer a su población, pero en varias zonas del país, su provisión está amenazada.

Pese a ser un país de “renta media”, según estándares internacionales, la población ecuatoriana ubicada en varios centros urbanos y rurales del país no tiene acceso diario a fuentes de agua limpia y segura. Sucede, por ejemplo, en Tulcán y Esmeraldas.

El problema no tiene origen en la naturaleza, sino en la pobre planificación y gestión de las autoridades competentes y la falta de conciencia ciudadana.

Los bajos caudales impiden que Tulcán tenga agua todos los días. La ciudad de Esmeraldas, por ejemplo, invirtió 130 millones de dólares en un sistema integral de agua potable que nunca fue terminado y, a pesar de varios “exámenes” de Contraloría, no hay quién dé razón ni del dinero, ni del suministro diario de agua. En Quito, el tratamiento de desechos es tan rudimentario, que los caudales llevan basura directo al océano Pacífico, contaminando cultivos y poblaciones enteras a su paso.

Los precios del agua potable se mantienen artificialmente bajos y es evidente que no contemplan el valor del recurso ni el costo de su preservación, sino apenas su transporte. Ajustarlos sería una medida ‘suicida’ para cualquier gobernante quien, en su defecto, deberá asegurar los fondos necesarios para finalmente proveer agua a todos los ecuatorianos y proteger el suministro futuro.

FRASES DEL DÍA

«Cuando la mentira es el pilar del sistema, la verdad es una amenaza fundamental que debe ser reprimida.”

Vaclav Havel (1936 – 2011), político y dramaturgo checo

«Un día hay que atreverse a luchar, pero al siguiente hay que atreverse a ganar.”

Bernadette Devlin (1947), política irlandesa