Movimientos antivacunas

José Manuel Aguilar Reyes

Me ha pedido un respetable colega que emita mi opinión sobre el movimiento antivacunas que se extiende por el mundo, llenando con sus comentarios, páginas enteras de las redes sociales que comunican al mundo actual, no atreviéndome de entrada a criticar su forma de expresarse y por ende pensar, pues son libres de hacerlo, al ser humanos que comparten con nosotros los problemas que nos aquejan.

Pero estos movimientos aparecieron en el mundo, desde cuando Edward Jenner (1749-1823) médico inglés, aprendió en una lechería el sustento de su teoría inmunitaria, al inocular al niño James Phipps de ocho años, materia de una llaga de la mano de Sarah Nelmer, ordenadora de la hacienda que, aunque tenía la enfermedad (viruela), no la expresaba en toda su magnitud.

El niño sufrió fiebres los primeros días y luego sanó, alistándose para recibir del doctor Jenner, la segunda dosis de viruela humana, y el paciente no sufrió ningún estrago, manteniéndose sano, alistándose para lanzar al mundo científico su teoría que luego se llamó vacuna, al desprender su nombre de las vacas que sirvieron de sostén al experimento del científico.

Fue Louis Pasteur (1822-1895), químico francés, quien prosiguió esta interesante senda científica, llena de críticas y sinsabores, produciendo la primera vacuna desarrollada en laboratorio, protegiendo a pollos de una terrible enfermedad que atacaba a esa especie y naturalmente a humanos, denominada cólera, enfermedad que fue la causa de millares de muertes en el mundo y que llena la historia de la medicina con sus relatos.

Aquí también, un prodigioso olvido de uno de sus ayudantes permitió que, al mes de recibir la primera dosis, los pollitos, recibieran la segunda descarga de la bacteria ‘ Cholera’, deslumbrándose el científico de que los pollos no desarrollaran la enfermedad, iniciando una larga cadena de experimentos con otros patógenos que deslumbró al mundo con sus resultados, siendo el principal soporte de la eficacia de las vacunas a la humanidad.

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