Villavicencio: una apuesta arriesgada

Ugo Stornaiolo

Es difícil olvidar esa escena en tiempos del correísmo más enardecido. Policías allanando la vivienda de Fernando Villavicencio para buscar (¿encontrar?) evidencias que vinculen al entonces periodista de investigación en corrupción o lo que era mejor, confiscar sus computadoras, celulares y cualquier cosa que posibilitara que Villavicencio hiciera denuncias -todas comprobadas, pocas avanzadas en la Fiscalía- sobre la corrupción de la década perdida.

Pero, como Villavicencio es necio, siguió denunciando y le costó un exilio apresurado y forzoso, en el que deambuló entre el Oriente, Colombia y Perú. El mandamás de esa época quería acabar con el incómodo personaje. Pero, más bien, Villavicencio consolidó una posición con sus investigaciones que le sirvió para llegar a la Asamblea para el período -ya mutilado- 2021-2025. Desde la Comisión de Fiscalización siguió siendo un personaje molesto para el correísmo y sus engranajes de poder, que persisten en las funciones del Estado.

Hoy encabeza el binomio del movimiento Construye, antes Ruptura, que encabezaba la ex ministra de Gobierno, María Paula Romo (el candidato dice que ella ya no está). Es la primera vez que será candidato a la Presidencia. Su carrera comenzó en Petroecuador, y como comunicador llegó a ser dirigente sindical de la estatal (espacio donde obtuvo información de la corrupción del sector petrolero).

Como asesor del asambleísta Cléver Jiménez siguió denunciando al gobierno del expresidente Correa. Villavicencio, Jiménez y el dirigente médico Carlos Figueroa fueron sentenciados a 18 meses de cárcel por supuestas injurias contra Correa relacionadas con el 30-S. No cumplieron la sentencia y se ocultaron en la Amazonía. Al prescribir la pena reaparecieron.

Fuera de la política, publicó más investigaciones. La más emblemática: el caso Arroz Verde, que terminó con sentencia contra Correa. Su gestión como presidente de la Comisión de Fiscalización fue criticada hasta el fin, como en el juicio político al presidente Lasso (lo acusaron de ser su aliado y de recibir fondos que no declaraba).

Un día antes de la declaración de la muerte cruzada, Villavicencio anunció su candidatura presidencial. Es Licenciado en Periodismo y Comunicación por la Universidad Cooperativa de Colombia del Ecuador (cerrada en 2012 por no tener requisitos de acreditación). Es una apuesta arriesgada. No es lo mismo enfrentar la corrupción desde el poder, que como periodista, denunciante y asambleísta.