Investigación previa personal y jurídica

Como dijo el presidente Moreno “nadie viene con el rótulo de corrupto”, al referirse a su colaborador Augusto, investigado por posible delincuencia organizada. Pero los mandatarios deberían tener más perspicacia al escoger a sus cercanos colaboradores, más aún investigar si existe alguna certeza en ciertos ‘chismes’ que circulan sobre aspirantes a funcionarios públicos de alto nivel.

La corrupción que vive el país, en el gobierno central y en el Municipio de Quito, obligan a desmenuzar las vidas, antecedentes, formación profesional y moral de quienes dependerá el acierto y buena fama del gobernante, pues el poder ya no es como antes, cada vez es más débil y transitorio. Se ha dividido a los regímenes en ‘libres’, ‘no libres’ y ‘parcialmente libres’. Parece que el nuestro va para ‘libre’ pues ansiamos a que vivamos una democracia de pleno derecho.

La perfección es ajena a lo humano. Como dice Wilde: “Todos estamos en el arroyo, pero algunos miramos las estrellas”. Necesitamos luchadores de los ‘imposibles’; gente honesta y ante todo pragmática. No precisamente sabios. La contradicción es buena. “Solo quienes piensan se contradicen” (Unamuno). Precisamos gente “que abra las puertas a lo bueno y cierre celosamente ante todo lo malo” (H. Keller). Esto es: unión, trabajo, solidaridad, evitar el soborno, el peculado, la explotación. El P. Arrupe S.J., quien fue Superior de los jesuitas, instaba: “No solo hay que hablar de Jesús, sino hacer lo que Él hacía”.

La investigación previa también debe ser jurídica. El gobernante democrático, hoy Lasso, va a gobernar con las leyes existentes. Rige en el Ecuador la Constitución de Montecristi, que no garantiza el Estado de Derecho, el sistema democrático, la institucionalidad (es perniciosa la existencia del Consejo de Participación Ciudadana). Mediante una consulta debe derogarse dicha Constitución e inmediatamente entrar en vigencia la de 1998, desde luego “afianzando con fuerza constituyente la dolarización”, consulta que han sugerido la Academia de Abogados, Universidades, periodistas y respetables políticos.