Por Sara Serrano Albuja
Indignación y dolor siente Quito por la pésima decisión del Ministerio de Cultura y Patrimonio que ha puesto en riesgo a la Biblioteca Ecuatoriana Aurelio Espinosa Pólit al disminuir drásticamente su presupuesto violando así varios artículos de la Ley y deshonrando la identidad cultural de Quito y la memoria de la patria.
El recorte del 40% de presupuesto para esta biblioteca no representa solo una afectación directa a ese bien cultural sino que es un retroceso a nuestro derecho a la identidad. Quienes hemos visitado en Cotocollao la hermosa Biblioteca Aurelio Espinosa Pólit hemos podido alimentar nuestro espíritu en su escenario especialísimo de paz, que es un templo del conocimiento. Su polifonía de secretos susurrantes se esconde en sus libros, en las alas de su policroma colección de mariposas, en sus pinturas, en sus encuadernaciones antiguas y otros seres.
Vulnerar esta biblioteca es dejarla a merced del deterioro y mangoneos burocráticos. El artículo 39 de la Ley de Cultura establece que la Biblioteca Aurelio Espinosa Pólit es la Biblioteca Archivo del Depósito Legal del Libro y Publicación Ecuatorianos, al amparo de su ley de creación y lo previsto en la presente Ley. Menciona la UNESCO como parte del patrimonio cultural de un pueblo varios elementos, entre ellos las obras de arte y los archivos y bibliotecas. ¿Cómo se explica que la Ley de Cultura hable de la inmediata actuación de la institucionalidad frente a los bienes que están en riesgo y esa misma institucionalidad los ponga en francas vulnerabilidad? El artículo 100 de la Ley de Cultura sostiene que: “La persona, colectividad o comunidad que tenga conocimiento de hechos que pongan en peligro la integridad de los bienes del patrimonio cultural, deberá denunciarlo ante cualquier dependencia del ente rector de la Cultura y el Patrimonio o ante cualquier autoridad municipal o judicial de la localidad”. Somos los quiteños los guardianes de este legado patrimonial. Señora Ministra María Elena Machuca, revoque, por favor, esta mala decisión contra el patrimonio. Quito está atenta.