Científicos del Smithsonian descubren nuevas especies en el Pacífico panameño

Panamá

Un grupo de científicos del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales, con sede en Panamá, están «sorprendidos» por las nuevas especies que hallaron tras un viaje de once días por el Pacífico oriental panameño.

El viaje resultó en una bonanza de biodiversidad, porque casi el 50 por ciento de los organismos que se encontraron en ciertos grupos son nuevos para la ciencia, según un comunicado de prensa que emitió hoy el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI, por sus siglas en inglés).

El periplo, a bordo del «R/V Urracá», la nave de investigaciones del STRI, tuvo lugar en el Pacífico oriental panameño, una región única y poco estudiada a las afueras de la costa de Panamá.

En esta zona existe un conjunto de islas tropicales, entre las que destaca el Parque Nacional Coiba, declarado patrimonio natural de la humanidad por la UNESCO.

Con la coordinación de Rachel Collin, del STRI, el equipo de científicos y colaboradores internacionales expertos en caracoles, cangrejos, camarones, gusanos, medusas y pepinos de mar, participaron en este esfuerzo por descubrir organismos en este ecosistema único.

Collin dijo estar «sorprendida» por el número de organismos marinos que nunca había visto.

La científica, quien tardó meses planeando este viaje y reuniendo al grupo de expertos, expresó que «la intención era obtener una fotografía de lo que podíamos encontrar, para luego planificar una evaluación más detallada de la biodiversidad en la región».

Agregó, en este sentido, que a pesar de que los corales y los peces de la región son bien conocidos, los invertebrados más pequeños han recibido poca atención en el pasado.

Jon Norenberg, experto en gusanos aplanados, del Museo de Historia Natural del Smithsonian en Washington (EEUU), señaló que más del 50 por ciento de los gusanos aplanados que encontraron nunca habían sido observados anteriormente.

Norenberg estudia todos los gusanos aplanados, desde aquellos muy pequeños que viven entre los granos de arena, hasta aquellos de más de seis pies de largo, que se alimentan de cangrejos enteros y liebres marinas.

Durante la expedición, Norenberg descubrió nuevas especies que viven y se reproducen entre huevos de cangrejos.

Subrayó que «estos gusanos pueden representar una amenaza importante para las especies comerciales, pero por lo general se les ignora ya que son más pequeños que los huevos mismos».

Los científicos encontraron que una de las características de las islas a las afueras de la costa de Panamá, es que albergan animales que por lo general se encuentran en el Indo-Pacífico, a medio mundo de distancia.

Darryl Felder, de la Universidad de Louisiana, destacó que «es alucinante pensar que las larvas de Hymenocera picta, un pequeño camarón que observamos en Isla Seca, puede sobrevivir un viaje de más de 3.000 millas del Indo-Pacífico a la costa de Panamá».

El científico de STRI, Héctor Guzmán, manifestó que inclusive el grupo de los corales suaves, relativamente bien estudiado en el pasado, aportó 15 nuevas especies en tres años como parte de una investigación complementaria organizada por él.

El equipo espera que los datos obtenidos sean de utilidad para Panamá y para la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM) de Panamá.

El STRI y la ANAM trabajan en conjunto para desarrollar el innovador plan de manejo para el Parque Nacional Coiba.

Los resultados de este viaje se publicarán en la literatura científica de los próximos años, luego de que los taxónomos tengan tiempo para clasificar cada organismo.

EFE