La primera vez que vi un mapa hídrico de Santo Domingo lo relacioné con un corazón y sus arterias. Sabemos de sobra la ubicación estratégica y el motor que representa nuestra provincia para el país, sus características hídricas también se configuran en un factor relevante dentro de nuestra descripción de territorio; sin embargo, en Santo Domingo cantón, la mayoría de esteros y ríos están encajonados, los mismos emergen en las zonas periféricas llevando consigo las descargas de Aguas Residuales Urbanas (A.R.U.). En efecto la contaminación es evidente.
Entre todos los capítulos de esta problemática, es urgente hablar de los tensoactivos de tipo detergente, estos componentes son los causantes de espuma, y para su descarga al sistema de alcantarillado se debe cumplir con su límite permisible de 2mg/l. En la práctica, cumplir con el límite es difícil, un mal uso de los detergentes y sumando las descargas de todas las viviendas y actividades de la ciudad, podemos imaginar que al igual que los otros parámetros los Tensoactivos se encuentran fuera de norma.
Producto de los tensoactivos se tiene cantidad significativa de espuma en los esteros y hasta ríos de la provincia, así pasa en ríos de otras ciudades también como por ejemplo el río Machángara en la capital, lo cierto es que, reducir la cantidad de tensoactivos en un cuerpo hídrico es complejo, razón que nos obliga a pensar en la prevención, en sensibilizarnos en la importancia de adquirir productos biodegradables que ya hay en el mercado, y sobre todo usar de manera adecuada según las recomendaciones del fabricante.
Cuando hablamos que todos somos parte del problema, hablamos de este tipo de casos, pero también sabemos que todos podemos ser parte de la solución, conscientes de que cambiemos hábitos de consumo y uso.