Ecuador paralizado

Daniel Jerez

Nuestro país está viviendo una situación crítica por la paralización de algunos sectores sociales, que según ellos reclaman a nombre del pueblo ecuatoriano por las medidas económicas adoptadas por el Gobierno Nacional, donde su rechazo radica en la eliminación del subsidio de combustibles, cabe destacar datos interesantes que pueden ser elementos determinantes para el debate, como que hace más de 40 años los combustibles son subsidiados y en nuestra región solo Venezuela mantiene esta política con resultados nefastos económica y políticamente evidentes.

Esta medida ha sido ineficiente y el eliminarlos hay que reconocer es una decisión valiente que varios gobiernos no se atrevieron a tomarla por más difícil situación que atravesaban, ya que no representa algo positivo electoralmente. Estos ajustes que el Gobierno ha considerado irreversibles están acompañados de varias propuestas económicas y laborales que serán enviadas a la Asamblea, que según lo anunciado beneficiarán a los sectores productivos y no buscan financiar al Estado, sino dar soluciones a la economía.

Las reacciones ante estas medidas han evidenciado paralización del servicio público de transporte, lo cual significa un delito según las autoridades, calles cerradas dentro y fuera de las urbes, caos, saqueos, movilización indígena y un detenimiento evidente en la dinámica económica del país que afecta a todos los ciudadanos, con más de 300 detenidos por actos vandálicos, la mayoría en Guayaquil, donde casi fue nula una protesta política y una declaratoria de estado de excepción por parte del Presidente de la República.

En la efervescencia política de estos últimos días está claro que el correísmo ha intentado de todas las formas potenciar el caos en sus constantes intentos desestabilizadores, desde la Asamblea con pedidos absurdos, hasta en las calles siendo incitadores violentos, buscando pescar en río revuelto, lamentablemente.

Las redes sociales y los medios de comunicación en estos momentos juegan un papel determinante en el traslado de información, lo que irresponsablemente muchos han hecho de las redes un fortín de contenidos falsos que alarma a la población, por eso siempre busquemos información de fuentes oficiales y medios serios.