Boho, marca ambateña que se toma el Ecuador

Renato Pástor, gerente de la empresa Textiles Pasteur con la marca Boho.
Personje. Renato Pástor, gerente de la empresa Textiles Pasteur con la marca Boho.

Boho es una marca que cada vez se hace más fuerte en el mercado textil a nivel nacional.

Desde La Victoria en el norte de Ambato, hace 15 años con tan solo cuatro máquinas y la misma cantidad de personas contribuyendo a este sueño inicio la empresa, que era dirigida por Diego Pástor, que acompañado de su mamá Teresa Cabezas y su hermano Renato tomaron sus ganas de salir adelante y lo que conocían sobre la elaboración de ropa interior y se pusieron manos a la obra.

Actualmente fabrican ropa interior y deportiva, ropa casual, uniformes corporativos e incursionan en la fabricación de calzado.
Trabajo. Actualmente fabrican ropa interior y deportiva, ropa casual, uniformes corporativos e incursionan en la fabricación de calzado.

 

 

El arranque

Al principio Boho hacía únicamente calzoncillos para hombres. Renato cuenta que en esa época entregaban 100 docenas de calzoncillos en una distribuidora de Guayaquil, que fue la primera en abrirle espacio para su mercadería.

Con la necesidad de seguir innovando pronto ampliaron su oferta a los bóxers, que los elaboraban para todas las tallas y así su trabajo dejó de ser para una sola distribuidora y empezaron a expandirse y a mostrar su trabajo no solo en Guayaquil sino en todo el Ecuador.

“Como en todo, el inicio fue difícil, pero nosotros siempre nos mantuvimos buscando innovar en todo momento para que nuestra marca imponga moda y confort”, sostuvo Renato Pástor, gerente de la empresa Textiles Pasteur con la marca Boho.

 

EL DATO
El nombre Boho fue inspirado en ‘hombre bohemio’, en el 
aventurero, en ese que no les tiene miedo a los desafíos 
y siempre está dispuesto a salir adelante.

 

Con esa visión luego de ver que el público, al que la marca ya había cautivado, requería de más productos, empezaron a estudiar el proceso de fabricación de leggins, y otras prendas de ropa deportiva para hombres y mujeres, dejando de lado la exclusividad de ropa interior masculina.

Así, de tan solo elaborar calzoncillos para hombres, actualmente fabrican, aparte de la línea de ropa interior y deportiva, ropa casual, uniformes corporativos y han incursionado en la fabricación de calzado.

 

 

Una de las fortalezas del trabajo de Boho es la tecnología con la que trabajan, como el robot de corte con el que cuentan.
Maquinaria. Una de las fortalezas del trabajo de Boho es la tecnología con la que trabajan, como el robot de corte con el que cuentan.

 

Sello de calidad

“En este mundo tenemos que aprender a innovar permanentemente y por eso hemos trabajado para mejorar no solo en tecnología, sino en cada uno de los insumos que utilizamos para garantizar la calidad en cada prenda que confeccionamos”, añadió Renato.

Actualmente cuentan con maquinaria de punta, a tal punto que la empresa adquirió un robot de corte y un pulpo automático lo que optimiza el proceso de producción.

Esto no es lo único, pues usan textiles e insumos de altísima calidad, a tal punto que el elástico con el que confeccionan sus prendas es de donde fabrican marcas como Nike, Lacoste, entre otras.

“Esta es la punta de lanza que nos permite a nosotros contar con productos espectaculares”, mencionó el gerente.

 


CIFRA

1 ÍTEM Empezaron a elaborar hace 15 años.

120 ÍEMS Son los que fabrican en la actualidad.

 

 

A esto se suma que la empresa cuenta con una certificación ISO 9001 – 2015, que se las entregaron en 2020 y la han renovado hasta la actualidad.

Esta calidad les ha permitido llegar a mercado internacionales como el de Estados Unidos y Perú. Su proyección es seguir expandiéndose a otros sitios, pero sobre todo contar con sus propias tiendas, como con la que cuentan en el centro de Ambato, o en su ‘outlet’ en la fábrica en las calles Maximiano Rodríguez y Alberto Rosero en Atahualpa. Por ello están próximos a abrir sus puertas en el Mall de Los Andes.

 

 

El valor de Boho 

Para Renato Pástor, nada de esto hubiese sido posible si es que no se cuenta con el talento humano de cada uno de sus colaboradores, que actualmente de manera directa son alrededor de 100 personas e indirecta 200 más.

“Un trabajador, un colaborador o un empleado que se siente bien en el lugar en el que trabaja, siempre va a dar su mejor esfuerzo para sacar adelante la empresa u organización, por eso siempre pensamos en ellos para que sepan que nosotros estamos para colaborarnos”, manifestó.

Resalta que si bien ellos siguen mejorando y optimizando los procesos de producción, esto no interfiere en lo más mínimo en las plazas de trabajo, pues se capacita a personas para que la maquinaria sea operada de manera eficiente.

“Jamás vamos a sobreponer a las máquinas antes que las personas, pues el ser humano es un punto inigualable dentro de todo el trabajo que hacemos en Boho”, finalizó.