Investigadores de la UTA recrean la iglesia Matriz de Ambato

Investigación. Así se vería la iglesia Matriz de Ambato si es que no se hubiera destruido con el terremoto de 1949.

A través de fotografías, documentos, entre otros archivos, los investigadores de la UTA recrearon con una fidelidad del 99% la iglesia Matriz de Ambato.

Pasaron 74 años desde que el terremoto de 6,8 grados en la escala de Richter destruyera varias ciudades de la sierra centro del país como Pelileo, Píllaro, Baños, Salcedo, Guano y Ambato.

Justamente en la capital de Tungurahua la gente estaba terminando de almorzar la tarde del viernes 5 de agosto de 1949 cuando a eso de las 14:00 se sintió el primer movimiento.

Los historiadores aseguran que el sismo duró alrededor de un minuto de absoluto terror para los que se vivieron este hecho que dejó 5.050 muertos, según el Servicio Geológico de los Estados Unidos, además de 100.000 personas sin hogar.

Memoria 

Una de las infraestructuras que colapsó en el terremoto fue la iglesia Matriz de Ambato que estaba ubicada en el lugar que actualmente ocupa La Catedral, edificación inaugurada en 1954.

Docentes y estudiantes de la Universidad Técnica de Ambato (UTA) arrancaron en 2021 un proyecto de investigación con el fin de recuperar la memoria arquitectónica del cantón.

Se analizaron 118 infraestructuras ubicadas en 50 manzanas del centro de Ambato, según la información obtenida, en el perímetro analizado existieron alrededor de 3 mil edificaciones que fueron derrocadas para la construcción de nuevas infraestructuras.

“Con toda la información levantamos planos de fachadas y en casos particulares hicimos análisis completos de la edificación para saber cómo estaban construidas y sus materiales”, dijo Fabián López, docente investigador de la UTA.

Iglesia Matriz 

La recreación de la iglesia Matriz de Ambato fue un capítulo especial de la investigación, pues existía información muy escasa de esta infraestructura que colapsó en el terremoto.

López cuenta que tuvieron que acudir a información que reposa en Quito y de historiadores que colaboraron con alrededor de 200 fotografías interiores y exteriores del antiguo templo.

Con este material se pudo realizar un despiece de la infraestructura, es decir una serie de imágenes que grafican la edificación por partes, columnas, bóvedas, techos, entre otros espacios.

“La calidad y la veracidad de lo que hemos hecho es del 99%”, aseguró el investigador.

Con todo este trabajo se pretende recuperar la memoria patrimonial de los primeros 50 años del siglo pasado, la cual fue destruida y que las nuevas generaciones desconocen.

La información de este proyecto que conforma un archivo de más de 500 páginas con fotografías, planos, fachadas y testimonios de varias personas se prevé la elaboración de un libro que será lanzado en el siguiente periodo académico. (RMC)