En Santa Rosa someten a un adulto y un menor a justicia indígena

Santa Rosa, Pilahuín, Juan Benigno Vela, Ambato, justicia indígena
Santa Rosa, Pilahuín, Juan Benigno Vela, Ambato, justicia indígena

Pasadas las 15:00 de ayer, sábado 3 de junio de 2023, en el ingreso a la comunidad Pucará Grande inició el periplo de dos personas, un joven y un adolescente, quienes fueron aprehendidos en Santa Rosa por los comuneros por presuntos actos delincuenciales. 

Los comuneros de Santa Rosa, Pilahuín y Juan Benigno Vela hicieron que los implicados se queden en pantalonetas y descalzos, enseguida les ataron la manos y les amarraron a la espalda grandes fajos de ortiga negra.

En el recorrido hasta el centro de Santa Rosa, los acusados iban en medio de los comuneros quienes les exigían que den razones de otras personas que estén involucradas en actividades ilícitas.

Así llegaron hasta la casa del hombre que empleó por más de un año a uno de los ajusticiados, el sujeto comentó que en ese tiempo jamás tuvo ningún contratiempo con su empleado, pero sostuvo que lo que cada persona hace en su tiempo libre ya no lo involucraba a él.

Estas declaraciones no dejaron muy contentos a los comuneros, quienes finalmente le advirtieron que si le alquilaba algún espacio, le daba trabajo a extranjeros o si los dos sospechosos detenidos volvían a cometer algún delito, en alguna de estas tres parroquias, volverían a buscarlo por encubrirlos.

Así el recorrido los llevó hasta una peluquería cerca del parque central de Santa Rosa, en donde el adolescente investigado señaló que el esposo de la propietaria del lugar se dedicaba a robar, por lo que la mujer fue sacada de su negocio y llevada hasta el centro del coliseo tras la iglesia de Nuestra Señora de La Elevación, en donde ya tenían a los dos implicados. Pero las cosas no llegaron a más con ella.

TOME NOTA 
Los supuestos delincuentes fueron acusados de intentar robar un local de celulares en Santa Rosa, así como de agredir a un cabildo y en algún momento hasta dijeron que eran vacunadores.

Asamblea

Una vez en el lugar, los cabildos y población tuvieron una asamblea en la que luego de escuchar al adulto investigado, que pidió perdón por sus actos, determinaron que, conforme a lo establecido en la cosmovisión indígena, los presuntos delincuentes recibirían unos latigazos y luego serían entregados a la Policía Nacional.

Delante de todo el pueblo, con un San Martín les dieron seis latigazos al adulto y cinco al adolescente.

Luego se leyeron las resoluciones a las que llegaron, entre ellas que los implicados no podían tomar ningún tipo de acción en contra de los dirigentes de las comunidades y exhortan a los habitantes de Santa Rosa a que limiten el alquiler a extranjeros en la parroquia.

Con todo resuelto, los dos implicados fueron entregados a la Policía Nacional, que de inmediato sacó a estas personas de la parroquia.

DATO 
Los audios y videos del proceso de investigación y juzgamiento de los supuestos delincuentes fueron entregados a las autoridades competentes para que realicen las investigaciones necesarias.

Opinión jurídica

Para el especialista en derechos constitucionales y derechos humanos, Christian Pérez, hay que tomar en cuenta qué es específicamente y qué conlleva la justicia indígena, esto para que se garanticen los derechos de las personas que están siendo sometidas a estos procesos desde la cosmovisión de los pueblos ancestrales.

Señaló que esta justicia también debe considerar el derecho a la defensa, a contradecir de lo que se está juzgando, a tener una audiencia, que haya una autoridad a quién acudir para que conozca el caso.

“Si se detiene a una persona sin que se cumpla con estos elementos, en ese momento ya no existe justicia indígena y se convierte en un ajusticiamiento, que es totalmente diferente”, puntualizó.

Finalmente mencionó que las autoridades deben velar porque este tipo de actos de justicia cumplan con el debido proceso y no se conviertan en ajusticiamientos. (DLH)

Resoluciones tomadas

  1. Entregar a los implicados a la Policía Nacional.
  2. Las autoridades de la justicia ordinaria, delegados de la Gobernación de Tungurahua reciben a los infractores y se comprometen a seguir el debido proceso de acuerdo a la leyes vigentes.
  3. Las autoridades de las comunidades de las tres parroquias en cuestión, solicitan a los dueños de viviendas de Santa Rosa que limiten el arriendo a las personas extranjeras.
  4. Los delincuentes serán responsables de cualquier atentado que sufran los dirigentes, comuneros y líderes que estuvieron presentes en este proceso.
  5. Las autoridades indígenas de las parroquias en cuestión harán el seguimiento de que se cumplan estas resoluciones.
  6. Ni los delincuentes ni sus familiares iniciarán ningún proceso judicial en contra de los dirigentes, líderes y comuneros presentes en este proceso de purificación.

Mensaje conciliador

Para el analista político Giuseppe Cabrera es indispensable entender que la justicia indígena no vulnera los derechos humanos de las personas y que eso es algo que debe vigilarse en este tipo de acciones cuando las comunidades someten a los delincuentes.

Por otro lado señaló que si bien es cierto este tipo de reacciones no tienen nada que ver con la alcaldesa, Diana Caiza, la autoridad “tiene una tarea pendiente, no puede alimentar el discurso de odio. El momento del discurso de los de abajo con los de arriba, es durante la campaña pero ahora son otras circunstancias y su tarea es recomponer el tejido social”.

Es decir que la tarea de Caiza es impedir y posesionar que los actos fuera de la justicia indígena no son los reivindicadores de su pueblo que ha sido relegado por tanto años, sino que eso está en “la incorporación de ellos a la toma de decisión, a la vida económica y en general a los espacios que les fueron negados por tanto tiempo”, finalizó Cabrera.