Dos hombres fueron llevados ante las autoridades judiciales competentes, tras ser señalados como sospechosos de ser parte de una organización dedicada al robo de carros y quienes serían los responsables de hurtar un vehículo al sur de Ambato.
El ilícito
Mario Z., de 39 años, aseguró a los gendarmes que su carro había sido robado el sábado 16 de abril de 2022.
El hombre aseguró que horas antes del delito, estaba tomando junto a dos mujeres dentro de un night club.
Con el fin de continuar ingiriendo alcohol, el hombre y las ciudadanas se fueron hasta un centro de diversión nocturna situado cerca a la Terminal Terrestre Sur.
A decir de la información policial, el hombre aseguró que algo le pusieron en su bebida, pues lo último que recuerda es haber estado recostado en la parte posterior de su carro y con las manos amarradas siendo abandonado en un sitio de la urbe que no pudo ubicar.
Supuestamente, fue recogido por las personas con las que libaba, quienes estaban a bordo de otro carro y lo trasladaron hasta Laquigo, donde finalmente lo dejaron y fue allí donde el sujeto pudo solicitar ayuda.
Procedimiento
Personal de la Policía Judicial (PJ) de Tungurahua fue convocado. Una vez conocido el caso, los agentes realizaron las operaciones de inteligencia y la aplicación de técnicas de gestión operativa que les permitió dar con el paradero del carro sustraído.
En el cruce de las calles Daquilema, entre Isidro Ayora y Pichincha Alta, dentro de una vivienda, en el estacionamiento, allí fue encontrado el automotor, cubierto con un plástico.
César A., atendió el tocar la puerta de los gendarmes. El ciudadano permitió el ingreso de los policías a la propiedad.
Si bien confirmaron que se trataba del auto robado, sobre su placa original, estaba otra sobrepuesta.
César les aseguró a los policías que su pariente, Carlos R., le llamó para pedirle que vaya hasta el redondel del estadio de Bellavista, y lo guíe hasta su casa y poder guardar “su carro”, argumentando que discutió con su pareja y no tenía dónde dejarlo.
DATO Dos de los tres detenidos están judicializados y deben rendir cuentas a las autoridades penales.
Atrapados
Con estos antecedentes y con la línea investigativa desarrollada, los agentes de la PJ detuvieron a Ángel C., de 35 años, quien tiene ocho detenciones anteriores; Carlos R., de 58 años, que posee 14 delitos como antecedentes penales en su contra y también fue aprehendido César A.
En la audiencia judicial, sobre Ángel y Carlos se abrió una etapa de instrucción fiscal por 30 días, debiendo presentarse periódicamente ante las autoridades, mientras César no fue vinculado al hecho delictivo. (MAG)