Cerumen, por qué se produce y cómo limpiarlo

De ninguna manera es recomendable usar hisopos y otros artículos para limpiar los oídos.
CUIDADO. De ninguna manera es recomendable usar hisopos y otros artículos para limpiar los oídos.

Entre las personas existe la idea de que la cera del oído es sinónimo de suciedad, esta es algo desagradable o innecesaria y que se tiene que limpiar regularmente.

Sin embargo, los expertos señalan que lo cierto es que está ahí por un motivo y si se retira, se está interfiriendo con un proceso natural y necesario del cuerpo.

El ser humano produce cera para mantener los oídos lubricados, limpios y protegidos de agentes externos.

Detalles

A pesar de ello, la acumulación de cera en los oídos es incómoda y puede causar molestos síntomas.

El cerumen sirve de protección para el tímpano frente al mundo exterior.

Es capaz de bloquear polvo, agentes extraños y suciedad que hubieran entrado en este conducto.

Además, de su función antibacteriana, también impide la invasión de hongos en el interior de los oídos.

Su olor resulta especialmente molesto para los insectos, que de otra manera podrían introducirse en esta cavidad. Debido a su textura grasienta cumple una función como lubricante, pues evita que la piel se reseque e incluso se agriete.

Algunas funciones de la cera

  • Actúa como un revestimiento a prueba de agua del conducto auditivo, protegiéndolo a él y al tímpano de los gérmenes que causan infecciones.
  • Atrapa la suciedad, el polvo y otras partículas, impidiendo que dañen o irriten el tímpano.

Para tomar en cuenta

En caso de tener mucho cerumen se puede usar soluciones para ayudarlo a salir, esto cuando no hay señales de un problema grave en el oído.

Y los padres deben saber que la mayoría de niños no necesitan hacer nada especial para eliminar la cera de los oídos. Si hay lavado de cabello regularmente, esto basta para mantener limpios los oídos.

Esta tarea a menudo se completa con el lavado tradicional, pero también ayudan otros tipos de movimientos. Por ejemplo, las actividades que implican a la mandíbula inferior (hablar, comer, beber, etc.).

Bajo ninguna circunstancia es recomendable usar palillos de algodón o hisopos, el dedo o cualquier otra cosa para eliminar la cera de los oídos.

Hay que tomar en cuenta que usar hisopos puede ser contraproducente al aumentar el riesgo de que se cree un tapón de cerumen, al empujar la cera hacia el interior del conducto auditivo.

El canal auditivo y el tímpano son muy delicados, y puede dañarlos o hacerles sangrar intentando quitarte la cera de esa manera.

Además, hurgarse en el oído también puede empujar y acumular la cera más adentro.

TOME NOTA
La composición del cerumen incluye aceites, pero también está formada 
por queratinocitos. Se trata de unas células epiteliales muertas, que 
pueden contener, además, otras sustancias químicas.

 

Síntomas de la formación de tapones de cera

Normalmente, los pacientes suelen padecer una serie de señales o trastornos que pueden estar relacionados con esta condición.

Entre los síntomas más comunes podemos destacar:

  • Dolor en los oídos: se trata de molestias de una baja intensidad y se localizan en el interior del oído, donde se ha producido la acumulación de cerumen.
  • Autofonía: se refiere a la situación en la que el paciente es capaz de oír su propia voz internamente.
  • Sensación de llenura o de taponamiento en el oído.
  • Zumbidos o ruidos molestos en el oído: en los casos clínicos más graves los sujetos pueden llegar a padecer mareos o sensación de vértigo a causa de ellos.
  • Pérdida parcial de la audición que puede empeorar con el paso del tiempo: constituye el síntoma más característico de este trastorno.
  • Fiebre: que puede variar en cuanto a su gravedad.