Santo Domingo entre las zonas con mayor índice de embarazos adolescentes

ALTERNATIVA. Se trabaja en planes de prevención y charlas de orientación.

En Manabí y Santo Domingo de los Tsáchilas se registra el 25% de los embarazos prematuros del país.

El embarazo en la adolescencia y la maternidad temprana son problemáticas sociales que afectan las trayectorias de vida de miles de niñas y adolescentes en Ecuador. Los efectos de estos fenómenos son múltiples y complejos, se traducen tanto en términos educativos como laborales, económicos y sanitarios.

En Manabí y Santo Domingo de los Tsáchilas se registra el 25% de los embarazos prematuros del país. En 2021, la coordinación zonal 4 del Ministerio de Salud Pública (MSP) identificó 100.130 consultas de embarazos primerizos, correspondían a mujeres de 10 a 19 años.

Gene Alarcón, responsable del proyecto de Prevención del Embarazo en Niñas y Adolescentes, enfatizó que es complicado sostener una estadística real, debido a la pandemia que impidió la movilización hacia los centros de salud, generando una disminución ficticia que distorsionaría el análisis cuantitativo.

No obstante, Alarcón consideró que existe una disminución del 1,5% de embarazos en adolescentes comparando el primer trimestre del 2021 al 2022. “El año pasado se registró un total de 4.000 partos en las dos provincias”. Durante los primeros meses del presente año, Santo Domingo de los Tsáchilas atendió a 808 jóvenes en gestación y 187 partos.

Altos índices

Pedernales, El Carmen, Manta, Chone, Portoviejo y Santo Domingo presentan los índices más altos. Alarcón explicó que el MPS trabaja en tres objetivos identificados para reducir los casos en estas zonas.

El primero es mejorar la atención en los establecimientos de salud pública con el propósito de recibir a los adolescentes y ayudarlos a entender la responsabilidad que conlleva la maternidad; además, a las personas embarazadas ofrecerles orientación para prevenir un segundo parto. El siguiente punto es fomentar espacios de participación en la juventud. Y el último es erradicar la naturalización de la violencia.

El Código Integral Penal en el Art. 171 establece claramente que mantener relaciones sexuales con una menor de 14 años es violación. Quedar embarazada a los 13 años, no es un caso natural o legal. Es importante notificar a las autoridades competentes para que investiguen y realicen seguimiento”, dijo Alarcón.

Otros factores como la inmadurez de pensamiento y física pueden sopesar el problema. “Si bien el cuerpo podría estar apto para afrontar el embarazo, sin embargo, la mente y la parte social aún no lo están”. También existen varios componentes de grado socioeconómicos como falta de recursos en los hogares o escapar de maltratos de los progenitores.

Prevención   

Ante esa responsabilidad, los ministerios de Salud, Educación, Inclusión Social y la Secretaría de Derechos Humanos impulsan el proyecto de Prevención del Embarazo en Niñas y Adolescentes con la finalidad de mejorar el acceso a los centros de salud pública que cuenten con personal capacitado y sensibilizado para atender demandas y necesidades, fomentando el sentido de la confidencialidad y la calidad de servicio.

Asimismo, el MSP organiza talleres con metodologías lúdicas que permiten dotar de nuevas herramientas a los servidores de salud para acercarse de mejor manera a los jóvenes y ayudarles en su proyecto de vida a través de la toma de decisiones y el reconocimiento de sus derechos.

EL DATO
Durante los primeros meses del 2022, en la provincia Tsáchila se atendió a 808 jóvenes en gestación y 187 partos.
Consecuencia
Según Unicef, las mujeres que son madres en la adolescencia tienen mayor riesgo de mortalidad materna y sus hijos presentan el mayor riesgo de mortalidad neonatal.