Los integrantes de la Asociación de Personas con Discapacidad Física de Santo Domingo, que han administrado una batería sanitaria municipal desde hace 15 años, en las calles Tulcán y 3 de Julio, no quieren que les quite esta fuente de trabajo. Según indican se les ha notificado que las instalaciones serán remodeladas, pero no les garantizan que regresen.
Nidia Bastidas, secretaria de la Asociación, manifestó que durante este tiempo ellos les han dado mantenimiento a las instalaciones, pero ahora personal municipal les hace conocer que están remodelando todas las baterías sanitarias, por lo que tienen que dejar de trabajar entre tres y cuatro semanas.
Esta situación les preocupa, porque mencionaron que en otro sitio pasó lo mismo y les quitaron la administración, dándoselas a otras personas. “Solicitamos que a través de un escrito, se nos dé la garantía que sí vamos a volver, pero no concretan solo nos han enviado un documento en el cuál nos dan a conocer que van a ingresar a trabajar”.
Dijo Bastidas que van a solicitar que el alcalde Wilson Erazo les reciba en comisión para que los escuche, ya que tienen los mismos derechos que todos los santodomingueños a ser atendidos.
Aproximadamente son 50 socios que se turnan para trabajar, siendo esta la única fuente de ingreso de recursos económicos.
Trabajos
El director municipal de Obras Públicas, explicó que hay un proyecto de mantenimiento y readecuación de baterías sanitarias, donde también entran nuevas que ya se están construyendo. Razón por la que se le ha pedido a la Asociación que les permita iniciar con la obra, pero dijo que hay resistencia. “No se busca sacarlos, solo se quiere trabajar”. (LMM)