Que el miedo y el terror no se apoderen de los ciudadanos es lo que recomienda monseñor Bertram Wick, Obispo de la Diócesis de Santo Domingos de los Tsáchilas, ante los últimos acontecimientos de violencia que se presentaron en el país.
Indicó que, como hombres y mujeres creyentes, se debe mirar la situación con ojos de fe y confiar en la asistencia del Señor Jesús.
“No tenemos motivo de creer que el Señor nos haya abandonado. Unámonos en oración. El miedo es tierra fértil para sembrar odios y divisiones. No es la hora de ocuparnos de esto. Tratemos de vivir en medio de precauciones prudentes con confianza y vivir nuestra vida de forma ordinaria”, puntualizó.
EL DATO Las eucaristías se desarrollan en las diferentes parroquias de acuerdo al horario establecido.
Hace un llamado para que los creyentes sigan asistiendo a las eucaristías y actos de adoración en las parroquias.
“Evitemos zonas de mayor peligro, pero no nos queremos dejar dominar por el miedo. Confiemos en los Sagrados Corazones de Jesús y María, a quienes nuestros antepasados consagraron a este país hermoso”. (LMM)