A este uniformado se le suman otros más, entre ellos uno con rango de capitán.
Una vez más, Santo Domingo de los Tsáchilas constó entre los escenarios para nuevos allanamientos ejecutados entre la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Policía Nacional.
En esta ocasión, el caso ha sido denominado ‘Jaguar’ y también salpica de corrupción a instituciones públicas. En el procedimiento fue involucrado Freddy Xavier L., miembro activo de las filas policiales, quien aparentemente cooperaba con una red delictiva.
El arresto del gendarme se desarrolló en la provincia Tsáchila durante las primeras horas de hoy, jueves 18 de abril y quedó a órdenes de autoridades judiciales para que resuelvan su situación legal.
Otros puntos
A través de información preliminar, los entes correspondientes revelaron que se trataría de una estructura delictiva que operaba a nivel nacional, y por este motivo se replicaron allanamientos simultáneos en las provincias: Pichincha, Guayas, El Oro, Manabí y Tungurahua.
La Policía Nacional, en su cuenta de X, informó que entre los resultados obtenidos consta la aprehensión de 14 personas, cinco armas de fuego decomisadas, aproximadamente 700 mil dólares en efectivo y 25 celulares.
La Fiscalía también utilizó esta red social para informar detalles sobre el caso Jaguar, el mismo que marcaría una posible relación con carteles internacionales para el tráfico de sustancias estupefacientes.
Sin pronunciamiento
En Santo Domingo de los Tsáchilas no hubo un pronunciamiento amplio sobre el allanamiento y la aprehensión de Freddy L., quien aparentemente laboraba en esta plaza.
Algunos de los involucrados fueron trasladados al cuartel Modelo de Guayaquil, donde en horas de la tarde sí hubo versiones por parte de la cúpula policial. Confirmaron que entre los involucrados hay alrededor de siete uniformados activos, entre ellos un capitán.
Un allanamiento se hizo en la Isla Mocolí, lugar exclusivo en el que residía uno de los gendarmes capturados. Durante la revisión del predio se encontró droga y fuertes cantidades de dinero en efectivo.
Modus operandi
Se presume que grupos narcotraficantes sedujeron al personal policial para que brinden información sobre las investigaciones que se realizaban en contra de este delito.
Los más ‘asediados’ eran personal de criminalística, antinarcóticos y otras unidades investigativas. Según una información policial, en la actualidad, la organización delictiva también trataba de reclutar, con el pago de 100.000 a 200.000 dólares, a agentes que pertenecen al grupo de lucha contra el crimen organizado, pero no pudieron. (JD)
Hilos del caso
La investigación está ligada a las operaciones del narcotraficante ecuatoriano Wilder Farfán, alias el ‘Gato Farfán’, y quien ahora está extraditado en Estados Unidos.