Solos, enfermos y, en ocasiones, sin alimentarse correctamente, así es cómo viven María Borja y Manuel Mesías, una pareja de la tercera edad en el sector 6 de la cooperativa de vivienda Santa Martha.
La situación de estos longevos es complicada, ni siquiera cuentan con un techo propio y, en la actualidad, pernoctan dentro de la unidad educativa que funcionaba en el barrio Jesús del Gran Poder.
A las limitaciones económicas se suman los achaques de la edad y enfermedades degenerativas que provocaron ceguera en Manuel, quien también presenta daños en sus pies.
El dinero que reciben por el bono solo alcanza para comprar algo de comida. Algunos vecinos sospechan que tiene pie diabético, pero no han recolectado los recursos económicos para financiar un chequeo médico.
María también está enferma y no tienen hijos. Sus fuerzas se debilitan cada día y la preocupación hace que los moradores del lugar pidan ayuda de autoridades o fundaciones.
Rocío Intriago es una de las personas que frecuenta a estos adultos mayores y testifica que ellos ya no se pueden valer por cuenta propia. “Mi tía tampoco puede caminar, pedimos ayuda para que puedan vivir tranquilamente”, expresó. (JD)
EL DATO
Los abuelitos necesitan atención médica.