Los peritajes duraron siete días. Bomberos y autoridades expusieron los resultados de la investigación.
“Con profunda tristeza e indignación, el Municipio tiene que informar que este incendio, lastimosamente, fue provocado”. Esto lo dijo el secretario de Seguridad, Juan Zapata, al presentar el informe de la Unidad de Investigación de Incendios sobre el siniestro ocurrido en el colegio María de Nazaret, en el centro de la ciudad.
Las investigaciones duraron siete días y según el comandante del Cuerpo de Bomberos, Eber Arroyo, se probaron todas las posibles causas del flagelo. “Se puede afirmar que en el edificio con más de 200 años de antigüedad ocurrió un incendio estructural premeditado”, ratificó.
Dentro de las pericias se estudiaron los patrones que dejó el fuego. Así se estableció que el área de origen se ubicó en el segundo piso y en el sector noroeste de la edificación. En esta área hay cinco dormitorios del personal religioso que –según explicó Arroyo- estaban desocupados.
Una de las causas que permitió que el fuego se propagara con gran rapidez, hasta consumir el 98% de la estructura, tuvo que ver con las condiciones estructurales del inmueble. “El tipo de edificación era de construcción mixta, con estructura de madera, paredes de adobe, ladrillo, cielo falso de madera y hormigón”, precisó Arroyo. En primera instancia, el fuego se propagó por el techo y el cielo falso del tumbado.
Más de 150 efectivos de diferentes instancias municipales trabajaron por más de tres horas para controlar el siniestro registrado el pasado 3 de septiembre, un día antes del inicio de clases. El área de pastoral, la rectoría y una oficina adyacente fueron las únicas instalaciones que no resultaron afectadas.
Tareas de reconstrucción
La directora del Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP), Angélica Arias, expresó su indignación por la afectación de un inmueble patrimonial. “Es lamentable que este suceso haya ocurrido precisamente cuando la ciudad festejada 39 años como patrimonio cultural de la humanidad”, afirmó.
EL DATO
El área total del inmueble patrimonial es de aproximadamente 3.150 metros cuadrados.El IMP se hará cargo del financiamiento y ejecución de todas las obras de reconstrucción. “Las labores de preparación y estabilización de la estructura tendrán un costo aproximado de 30.000 dólares. Por la magnitud de la destrucción y el tamaño y características del edificio, la inversión total ascendería al millón de dólares”, acotó.
LA CIFRA
640 alumnos reciben clases en horario vespertino en la Unidad Educativa Fernández Salvador, en el sur de la ciudad, debido a este incidente.En este edificio ya se habían invertido 400.000 dólares en intervenciones integrales. “Por ejemplo, como consecuencia del sismo de abril del 2016, el IMP hizo importantes reforzamientos estructurales. Ahora la tarea es inmensa porque se debe reconstruir de manera completa más de 600 m2 de la estructura”, concluyó. (JS)
Investigación en manos de la Fiscalía
Luego de las investigaciones y peritajes hechos por el Cuerpo de Bomberos se han podido recabar una sólida cantidad de evidencias físicas e incluso testimoniales de la acción de terceros para provocar el accidente.
“A la brevedad posible remitiremos el informe técnico a la Fiscalía”, aseveró el comandante de los bomberos, Eber Arroyo, quien dijo que está en manos de la Justicia y de la Policía Nacional hacer todas las investigaciones y acciones necesarias para que los causantes de este hecho sean castigados.
Exigencias sobre bienes patrimoniales
La Secretaría de Seguridad, la Dirección Metropolitana de Gestión de Riesgos y el IMP elaborarán protocolos para exigir a los propietarios, custodios y administradores de los más de 8.000 bienes patrimoniales de uso público para que mantengan un adecuado plan de emergencia y contingencia.
“Entre el 90 a 95% de los bienes patrimoniales está en manos privadas. Es imperativa la corresponsabilidad de las autoridades y la sociedad civil para preservar el patrimonio de todos”.
Angélica Arias,
directora del IMP.