Advierten que la generación de oportunidades va ligada a la disminución de la inseguridad. El llamado a la unidad no puede llevar al olvido de las irregularidades cometidas.
El discurso de posesión del presidente Daniel Noboa, además de corto y conciso, dio algunas pinceladas de un gobierno que quiere marcar un cambio de estilo y que estará orientado sobre todo a generar oportunidad para la juventud.
Las palabras de Noboa se mantienen en la línea que marcó a lo largo de su campaña presidencial y que fue duramente atacada por su ahora aliado en la Asamblea Nacional, la Revolución Ciudadana.
Lo que sí quedó claro es que para este gobierno “joven”, la prioridad será reducir la inseguridad y generar nuevas oportunidades para que los jóvenes no abandonen el país y retomar el rumbo del crecimiento económico de la nación. Tres misiones nada fáciles para el nuevo mandatario.
A lo largo de su mensaje, el mandatario hizo referencias a su juventud y a su “visión renovada” y dejó claro que espera dar respuesta a la ciudadanía. “Soy un hombre libre y pragmático que busca con empatía mejorar la vida de los ecuatorianos, como son todos aquellos jóvenes que depositaron su esperanza en mí”, apuntó.
Noboa puntualizó que contrario a lo que muchos piensan, la juventud “no es sinónimo de ingenuidad, para mí es sinónimo de fuerza. Fuerza para vencer los retos que se nos imponen”.
Los jóvenes dirigentes y analistas, Danilo Manzano y Nathaly Abarca hicieron para LA HORA, un balance sobre el contenido del discurso presidencial y sobre las aspiraciones de las juventudes en el Ecuador.
Ecuador de oportunidades
Los jóvenes coincidieron en la necesidad que tiene el país de generar nuevas oportunidades para el desarrollo económico y social de la población.
Nathaly Abarca, economista y subdirectora de la Corporación Juventud Activa de Guayas, destacó que una de las prioridades en las que debe poner empeño el nuevo gobierno es la reducción de la inseguridad.
“La seguridad es un pilar fundamental, en realidad necesitamos construir un Ecuador donde prime la seguridad, donde podamos emprender, trabajar sin extorsiones, es necesario trabajar de manera urgente en proyectos de seguridad y económicos que realmente busquen una mejora para los ciudadanos”, remarcó Abarca.
La joven economista recordó que Ecuador tiene puntos claves y críticos que deben empezar a trabajarse. “El tema de la inseguridad, de la deuda, son temas urgentes en los cuales el gobierno en los 16 meses que tiene que gestionar no puede dar marcha a posiciones donde no haya actuación verdadera y concreta”, recalcó.
Por su parte, Danilo Manzano, activista LGTBIQ++ y director ejecutivo de Diálogo Diverso manifestó que es importante que el nuevo gobierno alcance resultados observables y medibles con rapidez.
Para Manzano, en Ecuador “se necesita un presidente que ejecute acciones pragmáticas, donde los resultados puedan ser medibles, alcanzables y donde los problemas que aquejan a la ciudadanía puedan tener soluciones prontas y duraderas”.
El dirigente juvenil destacó que el gobierno debe responder a las grandes preocupaciones de los ciudadanos para la generación de empleo y seguridad, “es importante que los ofrecimientos hechos en campaña puedan ejecutarse y desarrollarse de manera concreta y con recursos económicos”.
Gobierno intergeneracional
Manzano alertó que el presidente Daniel Noboa debe tener la sabiduría para liderar un gobierno intergeneracional, en donde estén presentes la juventud y la experiencia.
“Es importante tener en cuenta que tenemos al presidente más joven de la historia de Ecuador; sin embargo, la historia nos ha demostrado que el manejo y la solvencia de lo político no está ligada a la edad de la persona, sino a otros factores”, remarcó.
Para el director de Diálogo Diverso, es importante que “el joven presidente esté acompañado en su gestión de una mirada intergeneracional. Solo por el hecho de ser joven, no quiere decir que va a sacar al país adelante”.
Para Manzano no se puede dejar de lado “la experiencia, la sabiduría, los aprendizajes de gente con mucha experiencia, transparente y no corrupta”.
“El presidente debe acompañarse de las buenas prácticas de quienes ya ejercieron cargos importantes desde lo político y de esta manera acompañarse en el manejo de un gobierno efectivo”, alertó.
En este sentido, Nathaly Abarca indicó que quienes van a ocupar cargos públicos en este gobierno deben tener en cuenta la gravedad de la situación que vive el Ecuador y actuar en pro de la ciudadanía y no “de los intereses partidistas”.
Indicó que “quienes van a ocupar un puesto en el gobierno tienen que entender la magnitud y la gravedad de la situación económica y de la seguridad. Es realmente inmoral lo que se está viviendo y es urgente que las personas que están ocupando y que van a ejercer funciones públicas empiecen a velar por los ciudadanos, porque somos los que decidimos”. (ILS)
Sin revancha, pero sin olvido
En su discurso, el presidente Noboa hizo hincapié en la necesidad de poner fin a la política de la venganza y el revanchismo en Ecuador. Aunque Danilo Manzano y Nathaly Abarca, se mostraron cercanos a la idea, coincidieron al señalar “la impunidad” y la falta de “justicia”, no puede permitirse.
Abarca dejó claro que la juventud se cansó, “estamos cansados del correísmo, estamos cansados del Partido Social Cristiano, de Pachakutik, son lo mismo de siempre, que no tienen propuestas realmente prácticas, que generen prosperidad para el Ecuador”.
Para la joven economista el voto “consciente” que apoyó a Daniel Noboa, tuvo en cuenta que “no había estado muy involucrado en temas políticos, fue el voto decisivo, apostamos por un candidato joven, por la iniciativa privada porque sabemos que Ecuador necesita inversión”.
Danilo Manzano al revisar el llamado a la unidad del presidente Daniel Noboa, indicó que es la posición de una política madura, “de una clase política transparente y no corrupta, lo cual, lastimosamente no tenemos en Ecuador, en este sentido, esperar lo mejor para este nuevo gobierno”.
Manzano apuntó que, aunque debe existir el llamado a un concilio nacional, “no podemos olvidar que en Ecuador la justicia tiene una enorme deuda pendiente con distintas personas. Hay que diferenciar ese espíritu de unidad y paz, que es importante, pero este llamado, no puede representar el olvido”.