La agrupación dice que, de ninguna manera el Estado debe negociar con las organizaciones criminales.
A una semana de que el presidente de la República, Daniel Noboa reveló haber recibido un comunicado de un grupo de delincuencia organizada en el que le plantea una negociación de paz, el movimiento Construye pide al mandatario que aclare al país qué es lo que se estaría negociando, y qué es lo que se estaría dispuesto a ceder.
“Cuando el presidente lo anuncia significaría que estarían analizando; el presidente no ha dicho todavía si él está de acuerdo o no, o cómo lo va a enfrentar el gobierno; por ello, una preocupación de Construye es qué podría ceder el Estado ecuatoriano ¿territorio?, ¿control?, ¿impunidad?, ¿qué es lo que estaría en juego en una negociación de esta naturaleza?, ¿qué están buscando estos grupos criminales?”, cuestionó María Paula Romo, dirigente de Construye y exministra de Gobierno.
Señaló que, en opinión de Construye, el Estado de ninguna manera debe negociar con las organizaciones criminales.
Romo agregó que en una crisis tan grave como la que vive el país, el Estado no debe renunciar a su deber fundamental: imponer la ley, someter a las organizaciones criminales, que el Estado no pierda más terreno contra las organizaciones criminales «porque lamentablemente se ha perdido mucho control sobre el territorio, se ha perdido control de la situación; esto se va de las manos todos los días», alertó Romo.
Añadió que el presidente tendrá que tomar decisiones, pero Construye ha ratificado su predisposición de respaldar leyes “no para negociar con los criminales” sino para asegurar que caiga sobre ellos todo el peso de la ley.
Mencionó, por ejemplo, la enmienda constitucional para permitir la extradición.
“Las cabezas criminales le tienen miedo a eso; a tener que pagar cárcel en países donde no pueden corromper o atemorizar a los jueces”, señaló la dirigente. (SC)
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