El primer paso es revisar los niveles de endeudamiento y pagar las deudas más caras lo antes posible. Uno de los principales objetivos es construir un fondo para la jubilación.
Cuando se llega a los 40 años, el ritmo de vida y las preocupaciones cambian con respecto a los 20 o 30 años. Probablemente, a los 40 esté centrado en buscar el balance perfecto entre: hacer todas las tareas del hogar, cumplir con su trabajo, ser un buen padre o madre, hacer que los ingresos alcancen para el creciente gasto, entre otros temas.
Todo esto hace que lograr el ahorro de dinero sea complicado. Sin embargo, nunca es tarde para comenzar a hacerlo. El punto de partida es tener claro qué tipo de vida quiere tener ahora y en los próximos años; además de cuáles son realmente sus prioridades: qué cosas que son indispensables para sentirse tranquilo con su calidad de vida:
A continuación detallamos cuatro claves para comenzar a ahorrar a los 40:
Elimine sus deudas
Alrededor de seis de cada 10 ecuatorianos de 40 años o más no ahorran porque están endeudados.
Ahorrar dinero es complicado cuando un gran porcentaje de su salario se va directamente a pagar deudas y los respectivos intereses. Por eso, lo primero que se debe hacer es tener claro en qué está endeudado y cuánto dinero realmente le queda por pagar, sobre todo en tarjetas de crédito que son las que más altos intereses tienen.
En otras palabras, hay que determinar cuáles son las deudas que más se ‘comen’ su ingreso mensual y ponerlas como prioridad para pagarlas lo más pronto posible. El financiamiento, o la toma de un crédito, no es malo per se, pero se debe entender que, en la medida de lo posible, se debe endeudar con miras a mejorar su situación a mediano y largo plazo, y no solo para satisfacer deseos inmediatos. Es decir, siempre será más rentable una hipoteca antes que un crédito de consumo para vacaciones.
Un nivel adecuado de endeudamiento se consigue cuando los pagos no comprometen más del 45% de los ingresos mensuales.
Fije sus prioridades
Una vez que elimine su deuda más cara, se podrá poner metas de ahorro mensual con base en objetivos. Si su lista de objetivos es bastante larga deberá priorizar y determinar cuáles son más importantes.
Sin duda, la jubilación debe ser una de sus prioridades. La cantidad de dinero que ahorre para esto determinará su calidad de vida durante sus últimos años, en donde los gastos en salud y cuidado suben drásticamente.
En el caso de ser de los pocos afortunados con afiliación al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), tampoco puede confiarse y pensar que podrá vivir únicamente con la pensión que le proporcione el Estado.
El sistema de pensiones actual es totalmente inestable. El fondo de pensiones se encuentra en número rojos desde hace años y lo peor es que esto seguirá empeorando debido a que la proporción de población envejecida seguirá creciendo mientras que el número de población activa decrece.
Aumente su ahorro
Probablemente esté ganando más dinero que a sus 20 o 30 años. Pero ganar más dinero no significa que deba gastar más dinero. Sabemos que puede resultar tentador gastar este dinero extra para aumentar su nivel de vida, pero este es un momento crítico para ahorrar para la jubilación.
Le quedan alrededor de 25 años para el momento de su retiro por lo que es momento de aumentar su nivel de ahorro para conseguir un patrimonio que le permita disfrutar del nivel de vida que desea.
Calcule la pensión media que teóricamente le corresponde para hacerse una idea de que cantidad de dinero necesita ahorrar mensualmente. La propia Seguridad Social pone a su disposición una herramienta que le permite calcular su pensión de jubilación conforme a los ingresos mensuales
Una vez que sepa que cantidad de dinero le corresponde recibir, puede pasar a calcular el complemento a la jubilación que necesitaría para lograr un salario que le permita mantener al menos su actual nivel de vida.
En Ecuador, la pensión equivale aproximadamente a entre el 70% y 80% de los sueldos de los cinco últimos mejores años.
Invierta
Una vez establecidas sus prioridades u objetivos, y que haya aumentado su capacidad de ahorro, la mejor forma de hacer crecer su dinero es invirtiendo. Esto es gracias al poder del interés compuesto.
Supongamos el siguiente escenario: necesita $150.000 para poder tener la jubilación de sus sueños. Esto supondría, si no tienes nada ahorrado hasta ahora, un ahorro mensual de $500.
En cambio, si decide invertir su dinero en renta variable (con una rentabilidad anual media del 5%) durante 20 años, de sus 40 a sus 60, y una vez llegada esa edad lo traspasa a renta fija (con una rentabilidad anual media del 2%) para disminuir el riesgo de su inversión, solo tendrá que ahorrar $210 al mes para conseguir su objetivo. (JS)