6 de cada 10 dólares de nuevos microcréditos fueron entregados a mujeres emprendedoras

HECHO. Las emprendedoras son uno de los pilares del sector microempresarial del país.

Durante el último año, las mujeres fueron las principales beneficiarias de nuevos microcréditos. En 2023, de un total de 63.000 nuevos clientes que accedieron a financiamiento bancario, el 49%, o 31.000, fueron emprendedoras. Las mujeres son mejores pagadores e invierten más eficientemente.

De acuerdo con la nueva edición de la publicación de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (Asobanca) y Aval Buró denominada “Radiografía del Crédito en Ecuador”, que es un estudio sobre los nuevos créditos entregados por los bancos a los ecuatorianos, se encontró que, entre enero y diciembre de 2023, 873.469 personas accedieron a un crédito por un total de $9.112 millones.

De ese total, el 51% son mujeres y el restante 49% son hombres, lo cual, según la Asobanca, es una muestra de los esfuerzos de los bancos hacia la inclusión financiera con enfoque en la reducción de la brecha de género.

La inclusión financiera es clave porque garantiza que cada día más ecuatorianos tengan acceso a productos y servicios financieros.

Esto a su vez es importante para las personas, porque reduce la pobreza, permite que se protejan contra riesgos financieros, contribuye a su estabilidad financiera, fomenta el desarrollo económico al permitir que más personas participen plenamente en la economía y las empodera para manejar sus propias finanzas.

Según la publicación, las mujeres optaron, sobre todo, por acceder al microcrédito. De hecho, el 59% de las nuevas operaciones de microcrédito fueron otorgadas a mujeres en 2023, lo que representa un total de 287.534 operaciones. Es decir, 6 de cada 10 dólares de los nuevos microcréditos fueron entregados a mujeres.

Si se analizan únicamente los clientes que accedieron por primera vez a un crédito en el sistema bancario, la Radiografía señala que hubo 63.024 nuevos clientes en 2023. De ese total, el 49% (31.000) son mujeres, el 47% (30.000) son hombres y 4% restante son empresas de todos los tamaños y clientes sin información. Esto indica que poco a poco, año tras año, la brecha entre hombres y mujeres se está cerrando.

Las mejores pagadoras

La radiografía evidencia, además, que las mujeres son mejores pagadoras que los hombres y esto se demuestra en que tienen, en promedio, un mejor score crediticio.

Por ejemplo, las mujeres de 26 a 35 años tienen un score crediticio de 715 puntos, mientras que los hombres de ese mismo rango de edad poseen un puntaje de 706.

El score crediticio es uno de los elementos que analizan las instituciones financieras dentro del proceso de la evaluación crediticia. El score es un puntaje cuyo valor va entre 1 a 999, cuyo proceso lo realiza los burós de crédito. Con ese puntaje se identifica la probabilidad de que la persona tenga un incumplimiento en su crédito.

Mientras más alto sea el puntaje del score, la probabilidad de incumplimiento es menor (alto score equivale a baja probabilidad de incumplimiento) y mientras más se acerca a 1, esta probabilidad es mayor.

Que las mujeres tengan un mejor carácter de pago que los hombres también se puede evidenciar en el último estudio de BID Invest denominado “Mujeres empresarias en ascenso, un estudio sobre el potencial de la banca mujer en América Latina y el Caribe y lo que significa para las instituciones financieras” (Febrero, 2024).

Allí se revisa que “las clientas empresariales y de banca personas de la región devuelven sus créditos más rápido que los hombres”.

Este estudio, que abarcó la participación de más de 240 instituciones financieras de 13 países, entre ellas 15 entidades financieras de Ecuador, revela que las mujeres son buenas clientas empresariales y de banca de personas (banca de consumo) porque pagan los préstamos más rápido que los hombres.

De acuerdo con los datos, los préstamos morosos a 90 días por parte de las mujeres alcanzaron los 2,7%, por abajo del promedio de los hombres que llegaron a 4%, lo que demuestra que ellas son mejores pagadoras.

Productos financieros específicos para mujeres

El acceso a financiamiento por parte de las mujeres es cada vez mayor gracias a que los bancos han desarrollado productos específicos para este segmento poblacional, acorde a su perfil y sus necesidades.

Otra acción importante -hacia un entorno financiero adecuado para las mujeres- es el desarrollo de estrategias de educación financiera, por ejemplo, en la creación de campañas de capacitación para el empoderamiento, independencia y desarrollo económico de ellas.

Este enfoque de género se ha convertido en una estrategia intencional, direccionada a un segmento clave de la sociedad por parte de los bancos, y las cifras así lo demuestran.

El estudio de BID Invest señala que el 73% de las instituciones financieras ecuatorianas tienen una estrategia de mercado (en marcha y en proyecto) enfocado en las mujeres.

Además, los bancos han buscado proactivamente financiamiento externo para destinarlo especialmente a las mujeres. Entre 2019 y 2023, los bancos recibieron $3.140,5 millones en financiamiento ya sea por crédito directo o por bonos temáticos (social, social de Género y Social de Género e Inclusión), cuyos fondos fueron destinados, sobre todo, a créditos productivos para mujeres.

ONU Mujeres menciona que el crédito en manos de ellas tiene un efecto potenciador más amplio en la economía porque traslada mayores recursos para su familia, traduciéndose en bienestar y más beneficios.

Un crédito en manos de una mujer la convierte en protagonista de su cambio y el de su familia. De hecho, $1 colocado a una mujer tiene un mayor impacto en la economía familiar que $1 colocado a un hombre porque se traslada de forma más directa hacia el mejoramiento de la calidad de vida de su entorno y su desarrollo personal.

Estos resultados positivos se apalancan en una mayor inserción laboral de las mujeres en los últimos años, y los bancos han aportado para lograrlo. Según cifras del Instituto Ecuatoriano de Estadística y Censos (INEC), a diciembre 2023, del total de personas con empleo, el 41,7% son mujeres (3.471.534), mientras que el 58,3% son hombres (4.850.405).

Sin embargo, las mujeres tienen crecimientos superiores que los hombres. Durante los últimos 10 años (entre 2014 y 2023), la tasa de crecimiento promedio del empleo de mujeres alcanzó el 3,1%, superando el crecimiento del empleo de hombres que llegó al 1,8%. (JS)

 

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