1,1 millones de bienes culturales del país, en riesgo

RIESGO. El edificio Aranjuez es inadecuado para continuar como repositorio de los bienes patrimoniales. Sumario
RIESGO. El edificio Aranjuez es inadecuado para continuar como repositorio de los bienes patrimoniales. Sumario

Tres informes técnicos evidencian la fragilidad del edificio Aranjuez, a cargo del Ministerio de Cultura y Patrimonio. En su interior está el mayor repositorio cultural del país.

En las intersecciones de las calles Reina Victoria y Jorge Washington, centro-norte de Quito, se ubica el edificio Aranjuez. La edificación, a cargo del Ministerio de Cultura y Patrimonio (MCyP), ocupa 9.000 m2, divididos en 3 subsuelos, una planta baja, un mezzanine y 10 pisos.

En su interior se encuentra el mayor repositorio del patrimonio cultural material del Ecuador.

Piezas arqueológicas (40.000); obras de arte colonial, republicano y arte moderno (8.200); volúmenes de ciencias humanas, cultura general, economía, ciencias sociales y mapas de cartografía (177.900); documentos en general y colecciones audiovisuales (704.000), forman parte de las reservas y repositorios de bienes culturales que están en peligro inminente debido las condiciones estructurales del Aranjuez.

Primeros informes que alertan del peligro

El 27 de julio de 2017, la Escuela Politécnica Nacional (EPN) presentó los resultados del análisis estructural de vulnerabilidad sísmica del edificio Aranjuez. En esos días el ministro de Cultura era Raúl Pérez Torres.

El primer informe (28 hojas) menciona que los dos bloques del Aranjuez presentan «un pobre desempeño estructural» frente a un evento sísmico, según las especificaciones «de diseño» de la Norma Ecuatoriana de la Construcción (NEC).

En otra parte se asegura que, “el reforzamiento estructural del edificio (…) es de absoluta prioridad». Llevar adelante este proceso, el cual califican como «altamente técnico e invasivo», necesitará del cierre «completo de secciones del edificio durante semanas (e) inclusive meses».

Se anota que este reforzamiento, cuyo valor puede llegar al 30% del total del costo de la edificación o igualar y superar el 100%, al no garantizar totalmente la resistencia del edificio en caso de un evento sísmico, se debe analizar la posibilidad de «reubicar o considerar el cambio de uso de ciertos sectores».

El segundo informe (56 hojas) deja claro que el Aranjuez frente a un evento sísmico «presenta una probabilidad de colapso del 90% para ambos bloques (…)» Además, el bloque uno «presenta una probabilidad de colapso de alrededor del 47% frente a un evento sísmico moderado».

En 28 meses no se habló del tema

Los dos primeros informes de la EPN parece que no levantaron interés de las autoridades. El 25 de octubre de 2019, Ana María Armijos, en calidad de ministra de Cultura (s), solicita al Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNGRE) una inspección técnica para determinar si efectivamente la estructura del Aranjuez «constituye un riesgo».

El 28 de noviembre de 2019, el SNGRE remite los resultados del análisis. Ahí se concluye que la edificación tiene una «alta vulnerabilidad (y) sí posee riesgo de daños estructurales que puedan atentar con la vida de sus ocupantes ante un evento sísmico».

Recomiendan su «reforzamiento estructural integral» o considerar el «uso de ciertos sectores» o «solicitar a la autoridad competente encontrar una edificación que reúna las condiciones óptimas estructurales» que estén en la capacidad de soportar el peso de los repositorios que contienen los bienes culturales y patrimoniales del país.

Nuevo informe ratifica el peligro

El 30 de enero de 2020, el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), a través de Joaquín Moscoso, su director ejecutivo, recomienda, entre otros aspectos, a Catalina Tello, subsecretaria de memoria social del MCyP: «realizar la evacuación progresiva de todos los bienes culturales y patrimoniales del MCYP» alojados en el Aranjuez «hacia una nueva infraestructura» que responda a las «condiciones técnicas y necesidades específicas» de cada bien almacenado en las reservas.

El referido informe fue realizado por Mayra Pullas, analista de gestión de riesgos y tráfico ilícito del INPC.

Los documentos recabados por LA HORA llegan a la conclusión que el edificio Aranjuez no tiene las condiciones mínimas para seguir siendo la “bodega” de la historia patrimonial del Ecuador.

En una segunda entrega se informará sobre los procesos internos que se llevaron a cabo para conseguir un nuevo edificio que cumpla las condiciones mínimas de almacenamiento de los 1,1 millones de bienes patrimoniales y culturales en peligro. (AS)

Los informes técnicos sobre el estado estructural del edificio Aranjuez, que alberga el mayor repositorio ecuatoriano, se presentaron en 2017.