No somos primitivos

Esta campaña preelectoral nos hace pensar varias cosas que se manifiestan en una o en otra forma. Definitivamente, no simplemente el cambio de líderes es el antídoto a la parálisis política, por ejemplo, la descentralización política no es ninguna garantía de democracia; con esto se está demostrando que a nivel nacional políticamente no somos primitivos ni subdesarrollados en la actualidad como lo éramos hace 300 años más o menos.

Lo que estamos viendo es las emergencias de grandes sub economías regionales, cada vez más coherentes dentro de cada economía a nivel nacional.

Recordemos algo muy importante que no podemos descentralizar la actividad económica, puesto que se trata de un tema de mucha trascendencia y que se debe pensar en organismos populares que están sujetos a la buena marcha de los movimientos económicos que no perjudiquen a nadie, más bien, que siempre beneficien al pueblo; para la descentralización todo el proceso de planificación política; por supuesto que esto implica masivas acciones, porque es necesario hacer el control de los presupuestos, los impuestos, la tierra, la energía y otros recursos de gran importancia.

Como comprenderá estimado lector, esto es irremediablemente indispensable y también irremediablemente en nuestro país. Además, las instituciones del Gobierno deben guardar correlación con la estructura de la economía; porque hoy estamos presenciando una descentralización fundamental poco advertida por los economistas de la producción y la actividad económica.